"España es un actor clave para el norte de África y la imagen de sus empresas es buena pese a la crisis; deberían aprovecharlo", afirma el coordinador de la Asociación de Cámaras de Comercio del Mediterráneo, que intervino ayer en Alicante en un seminario sobre desarrollo urbano organizado por Casa Mediterráneo. Participaron también urbanistas que creen que África no debe copiar el modelo europeo así como el embajador español Juan José Escobar, quien destacó el papel de la Unión por el Mediterráneo tras la Primavera Árabe.

¿Cómo afrontan la crisis los países del Mediterráneo sur?

Hay países que están creciendo, como Marruecos, con un 4%, y Turquía, con un 10%, pero la crisis es mundial y sus principales socios económicos y comerciales son los países de la UE. Desde enero el sur del Mediterráneo vive momentos históricos con el levantamiento de la sociedad civil en pro de la libertad, el derecho y la dignidad. En Egipto, Túnez o Libia el ciclo de producción está parado pero si se consolida la democracia en los próximos años tendrá lugar un crecimiento económico en el que España puede jugar un papel clave.

¿En qué sentido?

A veces el árbol no deja ver el bosque y, pese a la crisis, muchas empresas españolas son punteras en el mundo y tienen muchas posibilidades. El problema es que el sector exportador español no se ha desarrollado en los últimos años. No se han preocupado por fomentar la internacionalización y esa es la gran equivocación de muchas empresas grandes, medianas y pequeñas ya que vivimos en un mundo global. España es líder en Marruecos y y juega un rol importante en Argelia pero no ha alcanzado su gran potencial en el resto de países, en una zona en la que hay 300 millones de consumidores y de la que tiene una gran dependencia energética.

¿Qué deberían hacer?

Las empresas deberían apostar estratégicamente por esos mercados cercanos ya que en el peor de los casos hay cuatro horas de avión entre Barcelona y El Cairo, pero Madrid y Casablanca están a una hora, lo mismo que Alicante y Orán pero no lo ven. No sé si es por desinformación, porque el mercado local era boyante o porque apostaban por mercados más lejanos pero culturalmente más fáciles, por el idioma, como Hispanoamérica. Pero el caso es que se han olvidado del "jardín trasero", mercados con un potencial económico muy importante a los que en cambio llegan los productos chinos tras cruzar miles y miles de kilómetros cuando su imagen es mala frente a los productos españoles, de mucha mayor calidad y no muy caros.

¿Qué otras alianzas propone?

Una alianza estratégica entre los puertos del Mediterráneo español y los del norte de África sería clave para adquirir un rol más competitivo. Hay que ir más allá de la competencia entre puertos del mismo país, que los debilita. Y fomentar el turismo de cruceros.