El año judicial y político comienza con la atención puesta en un juicio de jurado que con toda probabilidad se va a celebrar este curso: la famosa causa de los trajes que sentará en el banquillo al expresidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps y en el que se enfrenta a una acusación por cohecho impropio. A pesar de que este delito está previsto para la intervención de un jurado popular y que la pena a la que se enfrenta Camps es una multa, la propuesta de la Fiscalía de Alicante no afecta a estos supuestos. En este sentido, López Coig considera positivo que el ciudadano pueda participar en los juicios por casos de corrupción a funcionarios públicos y cargos políticos.

En estos momentos, el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana está pendiente de resolver los últimos recursos sobre el caso. Pasado este trámite, sólo quedará fijar una fecha para la vista.

Las 36 personas de las que saldrá el jurado popular que tendrá que juzgar los hechos se elegirán una vez que se haya fijado la vista. Desde el TSJ se indicó que los miembros del jurado saldrán de la bolsa que tiene la provincia de Valenciana, ya que el Tribunal Superior carece de una propia. Para poder conformar un jurado tiene que haber un mínimo de veinte personas, que finalmente estará compuesto por nueve titulares y dos suplentes. El proceso de selección será minucioso pero tendrá una peculiaridad. Hasta ahora la militancia en un partido, no era algo que se mirara a la hora de hacer la selección.