El nuevo equipo de gobierno de la Diputación, comandado por Luisa Pastor, dará cuenta hoy de las facturas impagadas que dejó Joaquín Ripoll durante su último mandato. Tal y como exige ahora la ley, la institución provincial informará de sus deudas y dará a conocer que a 30 de junio de 2011, la cantidad pendiente de pago superaba los 2,4 millones de euros. La práctica totalidad de esa cifra se centra al área de Carreteras y responde al impago por parte del Ministerio de Fomento de un convenio que selló con la Diputación para cofinanciar infraestructuras viarias, según apuntaron ayer fuentes del Palacio Provincial. Al no recibir esos fondos, la institución no ha abonado las certificaciones de obra que periódicamente fueron remitiendo las dos empresas afectadas. En total quedan sin pagar 11 facturas de un proyecto y tres de otro. La más antigua data del 8 de marzo de 2010, mientras que la más cuantiosa roza los 400.000 euros.
Al cierre del primer semestre del año, la Diputación también adeudaba 600 euros a la Sociedad Filarmónica Alteanense; arrastraba 33 facturas sin pagar a la empresa Proaguas Costablanca por un montante global que superaba los 10.000 euros; y debía 17.800 euros a una constructora, tal y como consta en el informe que hoy presentará el grupo popular en la sesión plenaria de septiembre.
En ella también se dará cuenta de que todos los diputados tendrán dedicación exclusiva, salvo Adela Pedrosa. Es decir, que todos cobrarán de las arcas de la institución, a excepción de la alcaldesa de Elda, que lo hará del Congreso gracias a su condición de diputada nacional. En el pleno ordinario de hoy también se nombrarán a los representantes de la Diputación en diferentes organismos. En la Fundación de la Comunidad Valenciana Marq habrá cinco diputados y cuatro personas "de reconocido prestigio social o cultural". Éstas serán el presidente de Coepa, Rafael Martínez Berna; Francisco Ivorra Miralles, José Antonio Martínez y la exportavoz socialista en el Palacio Provincial Teresa Carbonell.
La Diputación ha abonado cerca de 5,7 millones de euros al arquitecto Juan Antonio García Solera por el proyecto del Auditorio. Al menos, eso apuntaron ayer fuentes del PP en la institución provincial. El Auditorio fue la actuación estrella de Joaquín Ripoll durante sus dos mandatos y su coste total ascendió finalmente a cerca de 50 millones de euros. En resumen, que su arquitecto ha terminado percibiendo casi el 11,5% del montante global. De la documentación que el PP llevará hoy a la sesión plenaria se desprende también que entre el 1 de abril y el 30 de junio de este año la Diputación abonó cuatro facturas al arquitecto García Solera por un importe de casi 1,5 millones.
