El expresidente de la Diputación, José Joaquín Ripoll, ha aceptado finalmente dejar el acta de concejal del Ayuntamiento de Alicante para ser presidente de la Autoridad Portuaria. Ripoll, según las fuentes consultadas, tomó la decisión a mediados de esta semana y será nombrado para su nuevo cargo en el pleno del Consell que se celebrará el próximo viernes 9 de septiembre.

En un principio estaba previsto que el nombramiento del presidente provincial del PP tuviera lugar en la sesión del Gobierno autonómico celebrada ayer. Según algunas de las fuentes consultadas, desde Presidencia de la Generalitat se alegó falta de tiempo material para tramitar el nombramiento en la reunión previa al pleno del Consell que celebran los subsecretarios de las distintas consellerias. Otras fuentes, sin embargo, aseguran que el actual presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, ha preferido esperar a la cena de apertura del curso político que ayer celebró el partido de la Comunidad Valenciana para hacer efectiva la designación y evitar así herir susceptibilidades en los sectores populares que hasta ahora han mantenido una actitud de enfrentamiento con el todavía máximo responsable del partido en la provincia de Alicante.

Ripoll se ve obligado a dejar el acta de concejal al existir informes jurídicos que señalan que hay incompatibilidad entre su designación como presidente del Puerto por parte del pleno del Consell, con lo que tendría la consideración de alto cargo, y el puesto de elección que obtuvo en los pasados comicios municipales.

El nombramiento de Ripoll desplaza del cargo a Miguel Campoy, actual presidente de la Autoridad Portuaria de Alicante. Las fuentes consultadas por este periódico aseguran que Campoy volverá a ocupar plaza de diputado nacional en las listas del PP por la circunscripción de Alicante, como sucedió en los comicios de hace casi cuatro años. Campoy dimitió como diputado en el Congreso precisamente para asumir las riendas del Puerto.

La materialización de este movimiento en el pleno del Consell del próximo viernes pondría punto final a la situación de desempleo en la que se encuentra en la actualidad el dirigente provincial. Un estado que Ripoll oficializó el pasado 1 de agosto al darse de alta en la lista del paro. El representante popular daba este paso, entre otros motivos, tras la negativa de la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, a que Ripoll tuviera competencias y sueldo en el Ayuntamiento.

La presión ejercida desde algunas facciones del partido en Alicante para que el mandatario provincial dejase su acta de concejal y la resistencia del propio Ripoll a dar este paso han propiciado un mes de agosto marcado por las negociaciones y las llamadas al entendimiento por parte del jefe del Consell. Un capítulo que escribía sus últimas líneas este misma semana cuando Fabra públicamente dejó en manos de Ripoll la "posibilidad de llegar a un acuerdo" sobre su futuro profesional. Una invitación que de cumplirse con el guión trazado se formalizará el próximo viernes.

En esta línea, se pronunció también ayer la portavoz del Consell, Dolores Johnson, quien al concluir la reunión del Gobierno Valenciano advirtió de que "tras las conversaciones de Ripoll con el presidente, en breve se tendrán noticias".