Después del pleno en el que fue elegida presidenta de la Diputación y de compartir mesa y mantel con su familia, Luisa Pastor dedicó sus primeras horas al frente de la institución provincial a terminar de cerrar el nuevo organigrama del equipo de gobierno y a confirmar, vía telefónica, a todos los diputados las competencias que gestionarán en el mandato que ahora comienza, un proceso que continuaba al cierre de la edición. La propia presidenta de la Diputación, apuntaron fuentes populares, mantendrá las competencias de Bienestar Social, que ya ostentó durante el anterior mandato. A partir de ahí, el poder de la institución, como ya avanzó este periódico, quedará repartido entre tres vicepresidentes de enorme peso político en las filas del Partido Popular.
Adela Pedrosa, alcaldesa de Elda, será la número dos de la Diputación como vicepresidenta primera y responsable de Recursos Humanos. César Augusto Asencio, primer edil de Crevillent, será vicepresidente segundo, llevará el área de Hacienda y será, además, el portavoz del PP, cargo que ya ostentó durante ocho años con Julio de España primero y con Ripoll después. Mercedes Alonso, alcaldesa de Elche, será la vicepresidenta tercera al frente de Juventud, Mujer y Residentes Europeos. Manuel Pérez Fenoll, exalcalde de Benidorm, no será vicepresidente pero, sin embargo, tendrá a su cargo el importante departamento de Obras e Infraestructuras, el que mayor presupuesto anual gestiona con los planes de cooperación municipal. Además, Luisa Pastor ha creado una nuevo área que coordinará la política de Comunicación de la institución provincial y que estará dirigida por Mari Carmen de España, hija del expresidente Julio de España y que es periodista de formación.
Al cierre de la edición, fuentes del PP confirmaron que Alejandro Morant, alcalde de Busot, será el diputado de Promoción y Desarrollo Local; y Juan Ramón Varó, edil de El Campello, se encargará de la gestión de la empresa pública Proaguas. También se daba por hecho que Manuel Aracil, alcalde de Sant Joan d'Alacant, podría asumir las competencias de los servicios de Salud Mental, ubicados precisamente en su localidad. El alcalde de Benissa, Juan Bautista Roselló, será el diputado de Cultura; y Adrián Ballester, edil en Redován y exdirector del Ivaj, se hará cargo del departamento de Modernización. Joaquín Albadalejo, concejal de Torrevieja, será responsable de Turismo -localidad que ha pedido cuota en esa área- y hará tándem con el alcalde de La Nucía, Bernabé Cano, como director del Patronato.
Francisco Javier Sendrá, alcalde de Planes, tendrá que tomar las riendas de una gran área que sumará las competencias de Parque Móvil y Arquitectura. El primer edil de Petrer, Pascual Díaz, volverá a Deportes, departamento que ya dirigió en el primer mandato de Ripoll. Federico Berna, alcalde de Albatera, asumirá Patrimonio y Asesoramiento Municipal. Y, finalmente, en círculos del PP se daba por hecho que Miguel Zaragoza, primer edil de Santa Pola, se haría cargo de Medio Ambiente.
Mónica Lorente estará en Ciclo Hídrico y Juan Molina en Bomberos
Los dirigentes afines a Ripoll que restan en la Diputación tendrán competencias de segundo orden y con poco peso en la institución. Mónica Lorente -a la sazón secretaria provincial del PP- y Juan Molina, durante el último mandato vicepresidentes, serán los responsables, respectivamente, de Ciclo Hídrico y del Consorcio Provincial de Bomberos. Los alcaldes de Guadalest y Ondara, Enrique Ponsoda y Ximo Ferrando, dos responsables comarcales del PP muy ligados a Joaquín Ripoll, se harán cargo, respectivamente, del BOP y la Imprenta Provincial, el primero, y de la gestión del Hogar Provincial, el segundo. En una reunión previa a la toma de posesión, Luisa Pastor adelantó que no se acometerán proyectos hasta ver la situación financiera de la institución. P. r. f. / A. F.
