La investigación practicada por la Unidad de Delincuencia Económica recoge numerosas conversaciones entre Vicente Sala, ex presidente de la CAM, y el constructor Enirque Ortiz, así como reuniones en el domicilio particular de éstos, que versan sobre la posibilidad de hacer negocio en suelo de Aguamarga y en Torres de la Huerta. Concretamente en esta última zona, Ortiz y CAM adquirieron la mayor parte de metros cuadrados antes de exponerse públicamente el PGOU. Torres de la Huerta fue una de las zonas en las que el Ayuntamiento de Alicante otorgó las mayores compensaciones en edificabilidad. Estas compensaciones se derivaron de la posesión de zonas protegidas en Aguamarga, donde ambos tenían propiedades.

El sumario recoge una conversación en la que el propio Vicente Sala le dice a Ortiz (justo en el verano de 2008, antes de que el Plan General saliera a exposición pública) que en lo que tiene le falta «un trozo del Plan», a lo que Ortiz le dice que se lo hará llegar en breve. El 2 de julio de 2008 Ortiz mantiene una conversación con un directivo de la CAM a quien le traslada que ese terreno «va recalificado» y que «es un suelo que es una maravilla».

Asimismo, respecto a la zona de Aguamarga, Enrique Ortiz afirma en una conversación que Alperi «pactó» con él y con la CAM la recalificación de un suelo para hacer la Ciudad de la Economía, un proyecto que, en palabras del propio Ortiz, era un «traje a medida de la CAM», si bien este complejo nunca se llevó a cabo por problemas planteados en la zona de afección y por Aena. El suelo a recalificar, de Ortiz y de la CAM, fue finalmente modificado en la última versión del PGOU como zona protegida, según la documentación a la que ha tenido acceso este diario, «para que sus propietarios no salieran perdiendo», viéndose así los propietarios compensados con edificabilidad en otras zonas.

Las referencias a la CAM son diversas a lo largo y ancho del sumario cuyo secreto se levantó ayer. Hay diversas alusiones a la relación que Ortiz mantenía con la entidad financiera en diversos proyectos urbanísticos ligados a la ciudad de Alicante en zonas como la Condomina, los saladares de Aguamarga o, incluso, el plan Rabasa, en el que la caja participaba en la financiación del proyecto. En muchos de los pasajes que figuran en el sumario se alude a contactos que Enrique Ortiz mantiene con directivos de la entidad financiera siempre en relación a sus negocios. Y no sólo en Alicante. También aparece en la documentación una referencia a la construcción del Hospital de Torrevieja, proyecto en el que Ortiz y la CAM son socios y que tiene, apuntan los documentos, «irregularidades».