La lucha y el esfuerzo que durante todo el año realizan los vecinos de Alicante por mejorar la ciudad tuvo ayer su reconocimiento. El "Día del vecino" fue un éxito, ya que hasta 2.500 personas se acercaron al Parque Lo Morant para festejar la segunda edición de este evento que, promovido por el Ayuntamiento de Alicante, quiere reconocer el trabajo de las personas que, de un modo desinteresado, buscan un futuro mejor para los habitantes de la ciudad.

En total participaron 150 asociaciones. Desde niños a mayores, los asistentes disfrutaron de todas las actividades organizadas. Y hubo una amplia variedad, ya que los organizadores pensaron en todos los perfiles posibles. De hecho, en el Parque Lo Morant tuvo que instalarse dos escenarios diferentes debido a la elevada participación de asociaciones y actividades programadas. Talleres de tango, salsa y otros bailes, además de demostraciones de tai-chi, bailes búlgaros y actuaciones musicales y teatrales fueron algunas de las actividades preparadas. Pero no se quedó sólo en eso, ya que en el otro escenario hubo bailes latinos, así como una demostración de ballet folklórico dominicano o un taller de danza del vientre.

Toda esta variedad hizo que los asistentes mostraran su aprobación a la celebración de un acto de estas características. Es el caso de María López, vecina del barrio Virgen del Remedio de Alicante, quien consideró que organizar un día como éste es "fantástico" y una "buena iniciativa". En esta línea, María López señaló que la jornada sirve para que "nos reunamos mucha gente del barrio y de otras zonas de la ciudad", por lo que considera que deberían realizarse más actos similares durante todo el año. Además, según manifestó, "este año la organización ha sido mejor que la del año pasado. Hay más fiesta y más cosas que hacer que en la edición anterior".

Y no es para menos, ya que la masiva participación de asociaciones propició que los responsables hicieran un importante esfuerzo para satisfacer a los más exigentes. De este modo, además de los dos escenarios, en el Parque Lo Morant, también se reservó un espacio para la instalación de carpas de diferentes colectivos sociales, educativos o de inmigrantes con multitud de actividades. Trenzado de cabello, degustación de productos búlgaros, pintura o diversos juegos fueron algunas de las actividades que, tanto mayores como pequeños pudieron disfrutar. Como hizo Francisco Padilla, vecino de San Nicolás de Bari, quien enfatizó la idoneidad de esta iniciativa porque "nos da mucha vida, tanto a los que venimos aquí como al propio Parque Lo Morant". De hecho, este vecino aprovechó la jornada para jugar a la petanca en los lugares habilitados para ello.

No fue el único. Cerca de una decena estaban con su "partidita", mientras que los más pequeños corrían por los alrededores o se montaban en los juegos habilitados para ello. "Los chiquillos se lo pasan genial. Esta iniciativa es algo necesario y espero que se siga celebrando. Además, este año está mucho mejor organizado y hay más gente que el año pasado", aseveró Francisco Padilla. En la misma línea se pronunció José Toledo Montoya, de 75 años y vecino de Virgen del Remedio, quien afirmó que "la gente está muy contenta y es algo que se debería repetir todos los años".

"Una gran labor"

Además de en la organización, el Ayuntamiento de Alicante estuvo presente durante la jornada con la asistencia de la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, y la concejal de Participación Ciudadana, Mari Ángeles Goitia, quienes vieron en primera persona algunos de los talleres que hicieron los más pequeños. Según Goitia, esta jornada, que se enmarca dentro de la celebración del Día Europeo del Vecino, ya se ha consolidado gracias a la implicación de las asociaciones. "En esta segunda edición hemos superado ampliamente la participación del año anterior, por lo que podemos decir que ha sido un éxito", aseguró la edil de Participación Ciudadana.

Buen tiempo, mucha gente y niños perdidos

Cerca de 2.500 personas de 150 asociaciones vecinales y sectoriales de Alicante participaron en la jornada de ayer desde las diez de la mañana en el Parque Lo Morant. El tiempo acompañó durante todo el día, lo que propició que el elevado número de niños pudieran jugar sin ningún tipo de problema. Sin embargo, la elevada afluencia de gente hizo que algún pequeño se perdiera. Fue el caso, por ejemplo, de una niña de 3 años llamada Nicole, que fue reclamada por megafonía, ya que no encontraba a sus padres. REDACCIÓN