La celebración del comité nacional del PSPV ha congregado hoy en la sede del partido tanto a dirigentes con nuevas propuestas como a voces críticas que reclaman la dimisión de la ejecutiva y un nuevo congreso, algunos de los cuales han organizado una algarabía al negarles la entrada a la reunión.

Una hora antes del inicio del comité, una veintena de militantes de Valencia y su área metropolitana se han congregado a las puertas de la sede de la calle Blanquerías portando con carteles con los lemas "La ilusión de un proyecto", "La dignidad de una dimisión" o "La honradez de un congreso".

Según han apuntado dos de los portavoces de este colectivo, José Martínez y Carlos Fernández, "el PSPV ha obtenido los peores resultados de la historia", motivo por el cual han reclamado "la dimisión del secretario general y de todo el comité nacional, así como la convocatoria de un congreso".

Asimismo, han lamentado que "la militancia de base no haya sido tenida en cuenta" por la actual directiva del partido.

Otra de las voces más críticas al inicio del comité ha sido la de Francesc Romeu, quien disputó el cargo de secretario general del PSPV a Jorge Alarte en el undécimo congreso celebrado en 2008.

"Hemos de plantear con calma soluciones a la catástrofe electoral, es necesario que la militancia tenga voz y para eso hemos de celebrar un congreso del que extraigamos un nuevo mensaje. No tiene sentido que esto se cierre con acuerdos bajo la mesa para repartirse las miserias institucionales que nos quedan", ha añadido.

A su juicio "la ciudadanía está esperando un nuevo discurso, una nueva forma de hacer las cosas y nuevos equipos" y ha apostado por la celebración de un congreso por ser el mecanismo adecuado para "diseñar una estrategia ideológica y programática que permita superar el distanciamiento con la sociedad".

Por su parte, el alcalde de Morella, Ximo Puig (otro de los que disputó el cargo a Alarte en 2008) ha anunciado antes del inicio de la reunión que presentará al comité la necesidad de alcanzar un "gran acuerdo entre fuerzas políticas, sindicales y empresariales en cuanto se constituyan Les Corts para generar un espacio de confianza y relanzar la economía valenciana y el empleo, que es la gran prioridad".

"Lo primero que hemos de considerar es la realidad, la derrota electoral, y analizar críticamente lo que hemos hecho. No toda la culpa la tiene Zapatero, como dice Camps, y por tanto tampoco de lo que le pasa al PSPV, pero tampoco la única responsabilidad es la del secretario general", ha apuntado.

Por ello, ha insistido en la necesidad de "situar en el centro de la agenda socialista el empleo" porque "es mucho más importante que la gente tenga empleo que nosotros ganemos las elecciones, aunque ambas cosas van ligadas".

En clave interna, ha asegurado que "las soluciones que ha ido empleando el PSPV desde el año 1995 no parecen ser la solución adecuada", y ha reivindicado "la integración, la suma", así como la necesidad de "ampliar el partido, la militancia y la alianza con la sociedad civil valenciana".

"Tenemos grandes posibilidades de futuro, el PP ha iniciado su declive, ha perdido cuatro puntos, y eso solo ha estado tapado por nuestra derrota histórica. Lo que pasa es que los ciudadanos no han visto una alternativa de progreso, y por eso ha crecido el Bloc, pero estoy convencido de que la verán en un futuro", ha añadido.

El secretario general del PSPV en Castellón, Francesc Colomer, ha afirmado que "el partido debe tener la suficiente altura de miras, ser fiel a sus votantes y rehacerse", y ha defendido la necesidad de "readaptar el mensaje para encarar el futuro con garantías".

Cuando el secretario general llevaba unos diez minutos de intervención, algunos de los militantes que se habían concentrado frente a la sede para pedir la dimisión de Alarte se han enfrentado a gritos a los organizadores del comité porque les han negado la entrada al mismo, que según han apuntado fuentes del partido, solo estaba permitida a sus miembros.