Constructores y promotores de la provincia rechazaron ayer el proyecto lanzado por el Ministerio de Fomento y la Conselleria de Urbanismo para crear un sello de que certifique la calidad y legalidad de las viviendas nuevas para su venta en el exterior. Representantes de las dos patronales alicantinas, Fecia y Provia, coincidieron en criticar la primera misión realizada por el ministro de Fomento, José Blanco, en Londres, anunciando descuentos de hasta el 40% en las viviendas turísticas que siguen en "stock" en la Costa Blanca, advirtiendo de que "ese producto no existe y las palabras de Blanco lo único que hace es restar valor a nuestro producto".

Claro se mostró el presidente de Fecia, Ramón Jerez, quien llegó a preguntarse "a quién ha consultado Blanco para lanzar la campaña. Me parece una iniciativa muy electoral y, además, lanzada sin consenso ninguno a no ser que a la única que haya preguntado el Ministerio sea a la Banca, porque no tengo ninguna noticia de que haya consultado con los empresarios que construyen y venden viviendas", enfatizó Ramón Jerez.

El vicepresidente Juan Cotino, responsable de la política de Vivienda, coincidió con la visión de constructores y promotores y consideró el viaje de Blanco a Londres como "una metedura de pata más del Gobierno. Zapatero cometió un error hace años criticando el planeamiento urbanístico creando un caldo de cultivo en toda Europa contra el sector y el Reino de España y ahora con cada patada que da se mete más en el charco. Demuestra que no entiende de qué va el mercado y, por lo tanto, no sabe vender en ese mercado". Para el vicepresidente, "las declaraciones que están realizando algunos responsables de España -en relación a la intervención de Blanco en Londres- son las peores que se pueden hacer para impulsar las inversiones en España".

La reacción de Cotino se producía tras conocerse que la patronal alicantina, Provia, remitió la semana pasada una carta al ministro de Fomento censurando el anuncio que hizo José Blanco en Londres anunciado casas de saldo en la costa española. El titular de Fomento llegó a citar ejemplos concretos de viviendas turísticas en la costa de la Marina Alta.

En cuanto al lanzamiento del sello de calidad propuesto por la Administración, los empresarios estiman que no es la mejor idea porque, incluso, puede generar dudas en un mercado donde hay francas señales de recuperación. Jerez se mostró contundente al apuntar que "no hace falta un sello de calidad. Lo que todos debemos hacer es cumplir con la normativa, la legislación que regula la edificación. Ya hay leyes y normativas y somos profesionales. Quizá sí tendría cierto sentido en la certificación de la seguridad, morosidad y formación", subrayó el presidente de Fecia.

Desde Provia, tampoco están de acuerdo con el lanzamiento de un sello de calidad, aunque serían más sensibles si el certificado llega de la Conselleria de Urbanismo. Un mal menor, según las fuentes consultadas que, no obstante, no creen que esta certificación sea la solución que necesita el sector para vender más viviendas. Los promotores creen que la caída del precio de las viviendas tocó fondo hace unos meses y ya se han acabado los "chollos" que ha publicitado José Blanco.

Cooperativas

Por otro lado, el vicepresidente Cotino firmó ayer un convenio con la Federación Valenciana de Cooperativas y la Asociación de Empresas Gestoras de Cooperativas y Proyectos Inmobiliarios para impulsar la construcción de VPO. Para ello, el IVVSA cederá suelo barato obtenido de los ayuntamientos -existen ya acuerdos con 54 consistorios- a las cooperativas. "A diferencia de las promotoras, las cooperativas no arrastran el lastre que suponen los excedentes de viviendas sin comercializar y, por tanto, tienen menores cortapisas para acceder a la financiación bancaria. Por ello es importante considerarlas en estos momentos un aliado esencial para la promoción de viviendas protegidas", aseveró Cotino.