Las inversiones de Instituciones Penitenciarias en la reforma de la red de canalización de aguas del Hospital Psiquiátrico Penitenciario de Fontcalent parece que se esfuman por el desagüe con la misma rapidez que el propio líquido. Los internos y trabajadores de este centro penitenciario, así como las viviendas de una veintena de funcionarios, han estado dos días sin suministro de agua por una avería en la nueva red de conducción, infraestructura en la que la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias lleva ya gastados 400.000 euros, según informaron fuentes del sindicato ACAIP. El corte se prolongó casi dos días más en las viviendas de los funcionarios porque uno de los condenados a penas de trabajo en beneficio de la comunidad rompió accidentalmente el sábado una tubería con una azada y la empresa de mantenimiento del Psiquiátrico no solventó el problema y pospuso la reparación para ayer lunes. La directora en funciones, con la información que le dio la empresa de mantenimiento, mandó un aviso al personal comunicando que el corte se prolongaba hasta ayer lunes por "un incidente ocurrido durante la reforma de la red de canalización de aguas".

Sin embargo, algunos funcionarios comprobaron que la rotura era de una tubería de agua de una de las viviendas que no están ocupadas en el centro penitenciario y que simplemente con cerrar con una llave inglesa la llave de paso de dicha casa estaba resuelto el problema, por lo que se lo comunicaron a la directora en funciones del Psiquiátrico Penitenciario y estuvo realizando gestiones desde la tarde del sábado hasta el domingo por la mañana para conseguir que la empresa de mantenimiento acudiera para restablecer el suministro.

La reforma del sistema de conducción de agua potable del Psiquiátrico Penitenciario fue adjudicada primero por 300.000 euros a una empresa, pero apenas comenzaron la reforma de la red porque la sociedad quebró y no concluyó el trabajo a pesar de haberlo cobrado el dinero presupuestado, según indicaron las fuentes sindicales.

Este imprevisto obligó a Instituciones Penitenciarias a realizar un nuevo desembolso de cien mil euros más para que otra empresa renovara la red de conducción. Las fuentes consultadas indicaron que dos operarios han realizado dicho trabajo y las nuevas tuberías se han colocado en el exterior, de tal forma que en algunos muros "hacen de escalera para subir al tejado de forma muy sencilla, algo inexplicable en un centro penitenciario". Parte de la red subterránea no se ha cambiado y, según señalaron las mismas fuentes, "aquí hay fugas de agua continuas y zonas empantanadas debajo del Psiquiátrico".

El pasado jueves era el día elegido para conectar la nueva red a la entrada del agua y se cortó el suministro. La alegría duró poco tiempo porque se produjo un primer reventón en uno de los tramos y a continuación otros dos más. La reparación se prolongó hasta el sábado, lo que se tradujo en malos olores en el Psiquiátrico porque no se pudieron realizar las labores habituales de limpieza.

El problema posterior que se produjo con la tubería rota por un penado a trabajos comunitarios puso en evidencia, según las fuentes sindicales, la poca operatividad de la empresa de mantenimiento, que pese a ser la misma que en Cumplimiento depende de ésta última para supervisar los trabajos, por lo que no podían restablecer el suministro de agua sin su permiso.