Los usuarios del aeropuerto de Alicante consideran que las pasarelas que los transportan directamente al avión son más cómodas y más seguras, pero no estarían dispuestos a pagar más por utilizarlas si alguna compañía decidiera repercutir el gasto que este servicio genera en los billetes de sus clientes.

La polémica sobre este servicio, que El Altet amplió con la inauguración de la nueva terminal, surgió tras el anuncio de la irlandesa Ryanair de retirar 31 rutas que opera desde Alicante si Aena le obliga a usar dichas pasarelas telescópicas. La aerolínea alega que ello le supone un desembolso de 2 millones de euros y un retraso en los embarques y desembarques, aunque en este momento las utiliza en el aeropuerto alicantino.

"Depende del importe que se añada". Esta fue la respuesta más escuchada entre los viajeros al imaginar que los precios subieran dependiendo de uno u otro sistema de traslado al aeropuerto. Una hipótesis que deja relegada la comodidad, ya que todos los usuarios dan por sentado que los servicios que se ofrecen en el aeródromo alicantino a la hora de subir o bajar del avión son completamente seguros.

Las opiniones se encontraban más divididas en cuanto a preferencias, algunos, como Gabriel Hernández, explicaron que al realizar el trayecto a pie se puede observar lo que sucede en la pista. "Me da igual el sistema para bajar o subir del avión". Mientras que otros, como Manuel González, de 56 años, optan por las pasarelas y detestan el embarque por autobús.

El tiempo de espera fue otro de los factores que los usuarios valoraron por encima de la comodidad, sobre todo entre los que se encontraban en la zona de llegadas. "Me resulta indiferente la forma en que se realice el embarque, me interesa que el sistema sea lo más rápido posible", afirmó Galo Santana, un joven de 26 años que aterrizaba ayer en Alicante a través de un vuelo de Ryanair. En la misma línea, Neus García, que llegó desde Barcelona a través de un vuelo de Spainair señaló "prefiero la pasarela siempre que se ahorre tiempo".

Por su parte, Maribel Ganau, de 42 años, señalaba que "cualquier forma de llegar al avión me vale, siempre que el precio sea el más bajo posible", mientras Ángel Garrido, de 52 años, apostaba por contar en el aeropuerto con el mayor número de destinos posibles.

Las autoridades de El Altet recordaron esta semana que las pasarelas telescópicas se utilizan por razones de seguridad y para un mayor confort de los viajeros. Asimismo, desde el aeropuerto de Alicante afirman que el embarque a pie en la nueva terminal es imposible por las mismas razones. Sin embargo, Ryanair sólo esta dispuesta a utilizar este último sistema, como hasta ahora lo hacía en las antiguas terminales.

"Siempre la pasarela será más cómoda, además se tiene la opción de embarcar en autobús", señaló David González de 47 años, quien además apuntó que el coste por el uso de el sistema telescópico es mínimo.