Tras los focos acaparados por los políticos, los representantes empresariales de toda la provincia comentaban sus impresiones sobre la nueva terminal. Satisfacción era una de las palabras que no se decían, pero que se intuía en los gestos de empresarios, hoteleros y comerciantes de la provincia que se concentraron ayer en la amplia zona de embarque tras la inauguración oficial del aeropuerto de El Altet.

Los dirigentes de los distintos ámbitos económicos provinciales también aprovecharon la ocasión para exigir que estas obras que culminaron ayer mismo no sean las últimas en llegar. El cumplimiento de los plazos para la llegada del AVE fue el reclamo inmediato, una demanda imprescindible para todos los sectores económicos alicantinos.

La mayoría de los representantes económicos visitaba la terminal por segunda vez, pero no dejaba de asombrarse ante las nuevas instalaciones. "Una pasada", expresó de forma más coloquial la representante de los hoteleros de Alicante, Cristina Rodes. "Unas magníficas instalaciones, que sin duda funcionarán perfectamente", se mostró más formal el presidente de la Cámara de Comercio.

Todos se mantuvieron en segundo plano, tanto en la ceremonia de apertura como en el cóctel posterior, donde la comitiva central estaba comandada por los ministros de Fomento, José Blanco, y de Sanidad, Leire Pajín. Las nuevas infraestructuras dotarán a la provincia de nuevas oportunidades de negocio y de una mayor capacidad para dar respuesta a los tiempos difíciles. Esta fue la versión oficial que repetían los máximos responsables de asociaciones empresariales como Coepa, Cepyme o la propia Cámara de Comercio. Sin embargo, estos máximos representantes medían las palabras a la hora de confirmar si realmente la recuperación económica vendrá de la mano de la inauguración de El Altet. "A la vuelta de la esquina tenemos la Semana Santa y en esa ocasión podremos comprobar esta magnífica sensación que hoy tenemos", aseguró el presidente de la Empresa Familiar de Alicante, Gonzalo París.

Uno de los más optimistas, sin duda, fue el máximo responsable de Coepa, Rafael Martínez Berna, quien vaticinó que "con total seguridad el aeropuerto escalará puestos en el ranking de los mejores de España", y superará en breve la posición de sexto aeródromo nacional para colocarse entre los cuatro primeros.

Por otra parte, el secretario general del PSPV, Jorge Alarte, dijo sentir "orgullo" por la puesta en marcha del nuevo edificio y aseguró que de esta forma el Gobierno "cumple sus promesas". Menos receptivos se mostraron el presidente de la Diputación, José Joaquín Ripoll, y el ex presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, quienes rechazaron manifestarse sobre la apertura del nuevo aeropuerto.