El PSPV no sólo no encuentra candidato a la Alcaldía sino que, día tras día, recibe negativas de los aspirantes a los que trata de poner sobre la mesa como opción de consenso. La última de las maniobras auspiciadas por Jorge Alarte, secretario general del PSPV, y por el síndic socialista en las Cortes, Ángel Luna, que está participando activamente en las conversaciones, tenía como objetivo convencer al catedrático Jorge Olcina, un independiente sin afiliación al partido, para que encabezara la papeleta socialista en Alicante. Olcina, sin embargo, declinó de plano el ofrecimiento, que también tenía el visto bueno de Roque Moreno, secretario general de los socialistas alicantinos y portavoz municipal, pero que se había realizado al margen de la dirección provincial del PSPV que encabeza Ana Barceló.
El contacto lo realizó directamente el propio Luna hace sólo unos días, como confirmaron fuentes socialistas. Sin embargo, el catedrático rechazó la posibilidad de entrar en política y trasladó a los socialistas su intención de continuar ligado a la investigación y a su trabajo en la Universidad de Alicante, explicaron estas mismas fuentes. El intento de contar con Jorge Olcina como candidato socialista a la Alcaldía, unido al ofrecimiento que también realizó la cúpula del PSPV a Yolanda Parrado, directora de la Casa del Mediterráneo desvela, de forma clara, que Jorge Alarte se está moviendo con la intención de lanzar a la palestra un candidato nuevo, de perfil joven, alejado de las luchas internas y que, por su prestigio -como es el caso de Jorge Olcina-, pueda generar consenso en las convulsas filas del socialismo alicantino. Alarte, por tanto, está trabajando con la hipótesis de un "tapado" para situarlo en una carrera que, sin embargo, no será fácil. Antonio Fernández Valenzuela, el ex presidente de la Cámara, ya trabaja para concurrir a las primarias en las que se elegirá al alcaldable socialista y, salvo sorpresa, llevará su órdago hasta las últimas consecuencias.
Pero las negativas que está cosechando Alarte revelan la debilidad del PSPV a la hora de poder cuadrar, finalmente, la candidatura a la Alcaldía de Alicante. El nombre que plantee la cúpula de los socialistas valencianos, en todo caso, se tendrá que someter al consenso de los "clanes" del PSPV en la capital y de los diferentes órganos de dirección del partido que, hasta ahora, han mostrado deseos diametralmente opuestos en este proceso de designación del aspirante a la Alcaldía de Alicante. Mientras, ayer continuaron los contactos entre los diferentes grupos y familias. El más notable, sin duda, fue la comida que mantuvieron los concejales críticos con la gestión de Roque Moreno al frente del socialismo alicantino -el llamado G-5- que, en principio, acordaron sumarse a la estrategia de buscar consenso sobre un candidato.
En Valencia, por otra parte, se reunieron los afines a Joan Lerma, ahora aglutinados alrededor de la figura de Ximo Puig, para certificar el acuerdo por el que el alcalde de Morella renuncia a disputar a Alarte la candidatura del PSPV a la Generalitat. Ambos dirigentes protagonizarán hoy una rueda de prensa para escenificar el pacto.
La directora de Casa del Mediterráneo declina la propuesta
La directora de la Casa del Mediterráneo, Yolanda Parrado, en declaraciones a la cadena Ser, confirmó que, efectivamente, había mantenido contactos, tal y como avanzó este periódico, con miembros de la organización socialista para encabezar la lista del PSPV a la Alcaldía de Alicante pero, sin embargo, como Jorge Olcina, declinó el ofrecimiento porque, dijo, su compromiso está concentrado en su labor al frente de la Casa del Mediterráneo, un puesto en el que apenas lleva un año. En esta tesitura, fuentes socialistas no descartaron que la dirección del PSPV ponga sobre la mesa a lo largo del próximo fin de semana un nombre, sin haberlo pactado previamente con las familias socialistas y sin tener en cuenta la opinión de Ana Barceló.
