De momento, los socialistas no logran hilvanar una solución para acabar de perfilar a su alcaldable en Alicante. Y no parece que la vayan a encontrar antes del comité nacional que el PSPV celebrará el próximo sábado en Elche para iniciar el proceso de selección de candidatos. Todo lo contrario. Las conversaciones y los contactos están encallados. Los socialistas se han atascado porque, de hecho, ninguno de los nombres que hay encima de la mesa generan, al menos por ahora y por una u otra razón, el consenso necesario para poder concretar el proceso con un sólo candidato. La maniobra del ex titular de la Cámara, Antonio Fernández Valenzuela, de postularse como aspirante socialista ha roto por completo la agenda que el PSPV se había marcado y ahora la búsqueda de un aspirante de consenso se encuentra, a pesar de que en las últimas horas se han intensificado las reuniones, en punto muerto.
Ninguna de las alternativas que están sobre el tapete generan, por el momento y a expensas de las negociaciones que se produzcan en los próximos días, la unanimidad necesaria para que se pueda cerrar un acuerdo. La opción de Valenzuela, el único aspirante que se ha lanzado públicamente a la carrera electoral socialista, no cuenta con consenso ni por arriba ni por abajo. Ni la ve Jorge Alarte, ni la dirección provincial del PSPV, ni la ejecutiva local que encabeza Roque Moreno, ni la inmensa mayoría de familias del socialismo alicantino. Valenzuela, eso sí, como ya se ha postulado, es el que más gana a río revuelto.
Una candidatura de Roque Moreno, portavoz socialista en el Ayuntamiento de Alicante y secretario general del PSPV en Alicante, podría encontrar más respaldo entre la militancia pero, sin embargo, no tiene el apoyo de los órganos de dirección del PSPV, especialmente, de la ejecutiva provincial de Ana Barceló, con la que está abiertamente enfrentado. La batalla es de tal calibre que Roque Moreno llegó a plantear a Valenzuela ofrecerle su apoyo con el objetivo de crear una mayoría que neutralizara los intentos de la también alcaldesa de Sax de lanzar la candidatura del periodista José María Perea, opción que la cúpula del PSPV también rechaza abiertamente y que tampoco cuenta con excesivos adeptos entre la militancia de la agrupación socialista de Alicante. Y todo ello a pesar, incluso, de que Ana Barceló ha iniciado una ronda de contactos con afiliados socialistas en la capital -ayer, sin ir más lejos, mantuvo algún encuentro- para tratar de "vender" la candidatura de Perea, de momento, sin mucho éxito salvo entre el grupo de la edil Brufal, que no la descarta.
En ese punto, los contactos siguen entre los diferentes "clanes" del socialismo alicantino. Hubo intensa actividad durante la jornada de ayer. Hasta el punto, por ejemplo, de que Roque Moreno "rompió el hielo" con militantes críticos a su gestión y departió durante cerca de una hora con el edil Lalo Díez. Por ahora, no hay consenso y es muy probable, de acuerdo con las previsiones de la dirección del PSPV, que el nombre del candidato que tenga la bendición de los socialistas valencianos -aspirante único o como rival de Valenzuela- no se decida hasta la próxima semana. Blanqueries prefiere un cabeza de lista joven y novedoso pero, en estos momentos, no se puede descartar ninguna opción. Y, por eso, al margen de los tres aspirantes citados y sin dejar a un lado la posibilidad de un "tapado", en círculos socialistas se manejaban ayer otros nombres como los de Luis Berenguer, tanto padre como hijo; el ex rector Salvador Ordóñez; Juana Serna; o Elena Martín.
Comida y cena de
Jorge Alarte en la
capital aunque sin
hablar con Valenzuela
Jorge Alarte estuvo ayer por la mañana en Guardamar y por la tarde en Orihuela. Dejó, sin embargo, espacio, entre su ruta por la Vega Baja, para comer y cenar, al menos esa previsión había al cierre de la edición, en un céntrico restaurante de Alicante. Al mediodía, compartió mesa y mantel con Ángel Luna, síndic en las Cortes y al que determinados sectores del PSPV siguen lanzando como candidato a la Alcaldía pese a que Luna rechaza esa opción en redondo. Ya por la noche, había mesa reservada para varios comensales, entre ellos, el propio Roque Moreno y Ángel Franco, que cuenta con la minoría mayoritaria de la agrupación socialista. Mientras, sin embargo, Alarte aún no ha mantenido conversación alguna con Valenzuela. Ni por teléfono. La cúpula del PSPV no contempla la opción de dar respaldo al ex dirigente empresarial. Todo lo contrario. Mientras, Valenzuela no se está quieto. Mantuvo un encuentro con Ana Barceló la pasada semana, ha hablado con Roque Moreno y tiene prevista una conversación con Ángel Franco tras un primer contacto telefónico. El grupo que lidera la edil Carmen Sánchez Brufal, por su parte, tiene la decisión firme de rechazar la vía de Valenzuela y no descarta la de Perea. Pero, en todo caso, hará lo que plantee el partido. P. r. f.
