El primer patrón de una patera que fue condenado el pasado mes de febrero en Alicante a cuatro años de prisión por traer inmigrantes intentó fugarse la semana pasada de la prisión de Fontcalent tras hacer un butrón en la pared de la celda que compartía con otros dos reclusos, los cuales no parece que participaran en la huida, según informaron fuentes penitenciarias.

La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ha abierto una investigación interna para analizar el intento de evasión y por ello se desplazaron ayer a Alicante desde Madrid dos inspectores para entrevistarse con los funcionarios que estaban de servicio y emitir un informe.

La fuga frustrada ocurrió la madrugada del pasado martes en una de las celdas triples del Módulo 2 de Fontcalent, departamento donde hay aproximadamente unos 250 internos. El patrón de la patera, un joven de origen argelino, logró realizar el butrón en la zona destinada en su día para colocar un radiador, por lo que el grueso del muro es la mitad que en el resto de la pared de la celda.

Una vez hizo el agujero, el recluso salió de madrugada y se descolgó al tejado de la zona del comedor del Módulo 2. La altura no era elevada y desde allí subió al patio de talleres, desde donde lanzó a las alambradas de seguridad un gancho de metal atado a una cuerda elaborada con sábanas anudadas. Hasta este instante los planes de fuga marchaban bien, pero al tratar de subir con la cuerda de sábanas se disparó la alarma y el preso optó por esconderse al oír que llegaba el coche de la Guardia Civil que vigila el perímetro de seguridad del centro penitenciario que hay antes de un segundo muro que aún tenía que saltar el recluso para salir a la calle. Minutos más tarde fue localizado donde se había escondido en la terraza y encarcelado de nuevo. Las fuentes penitenciarias consultadas indicaron que el butrón lo hizo en pocos días.