Salvo que ocurra un milagro, el secretario general del PSPV, Jorge Alarte, será proclamado el próximo 25 de septiembre candidato socialista a la Generalitat en 2011. Como ya ocurrió con su antecesor, Ignasi Pla, en los comicios de 2007 esta vez tampoco habrá aspirante alternativo en primarias. Uno de los pocos que podía lograr el 15% de las firmas del censo socialista para concurrir en el proceso interno es el alcalde de Morella y portavoz adjunto en las Corts, Ximo Puig.

Y Puig ha descartado ya totalmente plantear batalla al secretario general. Las dudas las despejó definitivamente en la reunión que el miércoles mantuvo con una treintena de diputados y dirigentes locales y comarcales de su órbita que en el último congreso se aliaron con la opción Nou Socialisme Valencià (NSV) que Puig encabezaba y que agrupaba al neolermismo ampliado. Al encuentro, que tuvo lugar en Sant Vicent del Raspeig, acudieron afines a Puig de las comarcas de Alicante. Hubo coincidencia en que es necesario algún golpe de efecto que haga de revulsivo al partido. Las primarias podrían servir para movilizar a los militantes, pero es posible que el remedio fuera peor que la enfermedad, según los asistentes.