El presidente regional del PP, Francisco Camps, pidió ayer a la dirección de su partido que avalara su propuesta de comité electoral, presidido por la misma persona, Pedro Agramunt, e integrado por los mismos miembros, a excepción del secretario, un cargo que antes ocupaba Víctor Campos y que ahora desempeñará Vicente Rambla, y con la incorporación de la diputada nacional por Castellón Andrea Fabra como vocal.
Con todo, entre buena parte de los asistentes se comentó que la verdadera figura emergente del nuevo equipo electoral es la consellera Paula Sánchez de León, consagrada por Camps como una persona clave en el PP de la Comunidad y en el Consell de la Generalitat, donde mantiene su puesto de portavoz. Incluso se baraja la posibilidad de que pudiera ser la sustituta del presidente en caso de abandono de éste.
En su discurso, Camps aludió también a la situación de Benidorm, "un sitio donde se ha producido un latrocinio" con la llegada al Ayuntamiento del "alcalde de Benidorm de la familia Pajín", mientras que el "alcalde de Benidorm de los ciudadanos de Benidorm está aquí sentado", el popular Manuel Pérez-Fenoll.
Para concluir, anunció su convicción de que el próximo alcalde de Benidorm "será el candidato que proponga el PP", pero en este punto ya no dio nombres. Finalmente, pidió a los populares que "a partir de este mismo instante, gobernemos y estemos en campaña", y sentenció: "Nací valenciano y moriré valenciano al servicio de los valencianos".
