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El número de ocupados en el sector agrícola es de 61.600 en la Comunitat Valenciana, lo que la sitúa en la cuarta autonomía española, tras Andalucía, Galicia y Castilla y León, con mayor población ocupada en el campo, según el Anuario Agrario 2010 elaborado por la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG).
Según el anuario, el número de ocupados en el sector agrícola nacional cayó un 2,64 por ciento en 2009 hasta alcanzar la cifra de 782.600 trabajadores, el 20,4 por ciento extranjeros, y tres comunidades autónomas, Andalucía, Galicia y Castilla y León, absorbieron el 48,44 por ciento del empleo global en el campo.
Además, subraya que la renta agraria total en términos reales durante 2009 registró un "acusado descenso" del 5,6 por ciento respecto al año anterior, hasta los 11.404 millones de euros, 17,2 por ciento por debajo aún de la cifrada en 1990 (13.765,70 millones).
El informe repasa los principales índices y estadísticas del sector durante 2009, marcado por la crisis económica y bajos precios en origen, aunque en parte compensados por la bajada los consumos intermedios (-17,7%, hasta 15.810,6 millones de euros), como fertilizantes, enmiendas o piensos.
Según los datos de COAG, la población total ocupada en el campo supuso un 4,19 por ciento sobre el total en los principales sectores económicos, que superó los 18,64 millones de trabajadores.
Andalucía dobla las cifras de ocupados agrarios respecto a otras comunidades, con 226.100 activos, seguida de Galicia (88.600) y Castilla y León (64.400).
Les siguen la Comunidad Valenciana (61.600 ocupados agrícolas), Región de Murcia (59.400), Cataluña (58.400), Castilla-La Mancha (49.600), Extremadura (41.400), Aragón (29.600 ocupados) y Canarias (23.700).
Por su parte, Asturias registra 16.700 ocupados en el sector agrario, País Vasco y Madrid, 13.700 cada una; Navarra, 13.200; Cantabria, 9.300; La Rioja, 6.700; Baleares, 6.500; y, por último, Ceuta, con 100.
Por su parte, la población extranjera ocupada en el sector agrario descendió un 6,50 por ciento en 2009 en España respecto al ejercicio anterior, hasta 159.700 activos, cifra que representa aún el 20,40 por ciento de todos los trabajadores del campo.
El informe apunta también que los efectos de la crisis económica se han notado en la evolución de los activos extranjeros y en la contratación de mujeres.
La población inmigrante ocupada ha frenado su tendencia creciente en términos absolutos en el campo y se ha visto reducida en 11.100 efectivos respecto a 2008, aunque en términos porcentuales su presencia en el mercado laboral agrario es mayor, al pasar de un 5,92% en 2008 a un 6,21 por ciento en 2009.
COAG apunta que hay menos personas extranjeras trabajando en las explotaciones agrarias, pero su peso, en relación a las cifra globales, es mayor, porque el campo ha recogido un parte de los descensos de ocupación de la mano de obra extranjera en industria y construcción, debido a la crisis económica.
Explica que las estadísticas revelan un mercado laboral agrario "masculinizado" debido a una baja tasa de ocupación femenina, con 205.800 ocupadas (el 24,86 por ciento del total), que cae además un 1,14 puntos respecto a 2008, en un contexto donde los varones siguen acaparando la mayor parte del empleo (576.800 trabajadores).
"Las mujeres han pagado en mayor medida que los hombres los efectos negativos de la crisis económica y el aumento del desempleo agrario", puntualiza COAG en su Anuario.
En diciembre de 2009 había 3,92 millones de personas paradas, de las cuales 106.133 corresponden al sector agrario (2,70 por ciento), mientras que el 0,76 por ciento restante (30.014 efectivos) era población parada extranjera que realiza su labor en el campo.
El Informe revela que el sector agrario posee una tasa comparativamente mucho mayor de población extranjera parada (28,27%) que otros sectores como los servicios (12,51%)
