Este año los aspirantes que busquen hacerse un hueco en las Fuerzas Armadas tendrán más dificultades por lo reducido de la oferta -325 plazas para toda España- que complicará las opciones de acceso haciendo que por cada plaza luchen cerca de 50 personas, si se mantiene el nivel de demanda. Algo que se espera con toda probabilidad, teniendo en cuenta el sueldo base de 600 euros y el crecimiento del paro.