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El presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, aseguró anoche que desconoce los hechos que motivaron su comparecencia ayer tarde ante el titular del juzgado número 3 de Orihuela en el marco de la denominada "operación Brugal" y que, en cuanto se levante el secreto sumarial, "evidentemente" ejercerá las acciones legales "que correspondan" a su defensa. En la misma línea de su comparecencia del miércoles, José Joaquín Ripoll insistió que aún desconoce "los hechos" que han motivado su declaración y "el porqué".

Ripoll hizo estas declaraciones sobre las 21.30 horas a los medios de comunicación en la Diputación, apenas dos horas después de haber declarado ante el titular del Juzgado de Primera Instancia número 3 de Orihuela, Carlos San Martín, que decidió mantener la situación de libertad provisional para el también presidente provincial del PP -al que se le imputan cinco delitos- y para otras cuatro personas. Una vez más, el también presidente provincial del PP se esforzó por dar una imagen de respuesta pública tras su imputación, a diferencia de lo sucedido con Francisco Camps en el "caso Gürtel".

Asimismo, Ripoll, que volvió a comparecer en presencia de sus abogados, no ha quiso especificar los delitos que se le imputan. Según informó el TSJCV, las diligencias previas han sido abiertas por los posibles delitos de tráfico de influencias, fraude y cohecho, entre otros. Ripoll señaló, además, que durante su comparecencia el fiscal pidió "una fianza de 500.000 euros" y que se personara de forma periódica en el juzgado número 3, en base a lo que estimase el juez, como medida cautelar, y que el juez ha dictado un auto "en el que adopta la decisión de mantener la libertad sin fianza" para él, "sin ninguna medida cautelar". El presidente de la corporación provincial recalcó además que declaró "de forma voluntaria" y que, por el secreto de sumario, no conoce las diligencias.

"En cuanto se levante el secreto sumarial ejerceré evidentemente todas las acciones legales que correspondan en mi defensa y desde todos los puntos", avanzó. Además, el presidente de la Diputación señaló que su comparecencia "voluntaria" ante el juez duró una hora, en la que "durante los primeros 30 minutos" el titular del juzgado le explicó "que no había una citación judicial" sobre su persona, y que "podía hacer la declaración o negarse a ello", puesto que "no había sido citado judicialmente".

Después de esta explicación, Ripoll trasladó al juez que "comparecería de forma voluntaria", y aseguró que una vez aceptada esa comparecencia, el juez le imputó formalmente y le leyó todos los derechos que le asisten.

También le explicó formalmente que hay un "secreto sumarial sobre las diligencias que se están incoando, que dura más de 3 años", y por ese motivo, "no podía contar ninguno de los hechos que están recogidos en esas diligencias previas".