A las doce del mediodía de ayer, las pintadas del contrafuerte de la muralla ubicada en las faldas del Benacantil ya habían sido tapadas con una capa de pintura. Los colorines de las firmas grafiteras quedaron ocultos bajo una capa de pintura de un color similar a los sillares del muro, aunque se notaba la diferencia de tonos. Desde el Consistorio se ha optado por recurrir a una socorrida capa de pintura ante la dificultad de limpiar los grafitis "Eliminarlos es casi imposible y por eso no queda más remedio que recurrir a la pintura como hacemos en muchas de las fachadas de la ciudad en las que actúan los grafiteros" señaló el edil de Atención Urbana, Andrés Llorens.
Finalmente, y debido a compromisos de trabajo, en las labores de limpieza del muro no se pudo contar con ningún grafitero de los que han realizado trabajos sociales para evitar las sanciones económicas, y se recurrió a otras personas condenadas por faltas y que también participan habitualmente en este tipo de iniciativas.
Desde el Consistorio se ha considerado urgente abordar la limpieza de las pintadas del castillo de Santa Bárbara para evitar el efecto llamada que la permanencia de las grandes firmas, visibles perfectamente desde la playa del Postiguet, hubieran podido producir en otros de los grafiteros que actúan en la ciudad, tal como ha ocurrido, por ejemplo y como caso más llamativo, en el castillo de San Fernando que está totalmente lleno de grafitis. Además, desde la concejalía de Atención Urbana se ha tenido en cuenta el carácter emblemático de la fortaleza que, en general, es respetada por los alicantinos y no suele ser objeto de actos vandálicos.
Tal como recogió este diario el
jueves, las pintadas se hallaban en un contrafuerte situado entre la muralla que desciende hacia La Medina, el Raval Roig y la Ereta, justo encima de las calles San Pedro y San Juan. En las labores de limpieza de ayer no hizo falta recurrir finalmente a arneses ya que se puede acceder a la zona a pie incluso para cubrir la pintada más alta cuyo autor, Step, la realizó hace cinco años tal como indicó ayer él mismo.
Para intentar reducir los actos vandálicos de este tipo, desde el Consistorio se está preparando una ordenanza municipal que endurecerá las sanciones.
