"La subida del IVA nos va a dejar más pelados de lo que ya estábamos. Nos va a destrozar del todo", apuntaba ayer un trabajador del parking de Alfonso el Sabio, que ha actualizado los precios de sus abonos de acuerdo al nuevo porcentaje, como el aparcamiento del Puerto, que subirá unos 50 céntimos al día. "Lo vamos a notar todos", dijo una ciudadana cargada con las bolsas del supermercado, mientras el empleado de un establecimiento frente a la Diputación añadió que la gente compra menos desde hace meses y que ahora será peor. "Nos crujen por todos lados". A él también le encarecen los productos y si no sube precios pierde dinero.

Tres chicas que van de rebajas por Maisonnave creen que siempre pierde el consumidor, "que somos los que pagamos". Por ello no adquirirán nada hasta las segundas o terceras rebajas. Tampoco piensan comprar Lola y Jaime. "Ni con rebajas, ni sin ellas porque no tenemos un duro. El IVA lo empeora, y afecta a todos porque si la gente no compra el comerciante también lo nota". Es el caso del dependiente de una tienda del centro, que afirma que "la cosa está muy mal. Nos comemos la cabeza para hacer promociones pero con la subida del IVA no sirve de nada", dice.

El pequeño y mediano comercio de Alicante asumirá en un principio la subida que le corresponde, un 2%, (del 16 al 18%), aunque "dentro de dos o tres meses no lo podremos aguantar". Pedro de Gea, presidente del Colectivo de Comerciantes, que engloba a 3.000 establecimientos en la capital, augura un retraimiento del consumo y un final de año muy duro. "Me da miedo que para subsistir el sector tenga que tocar los puestos de trabajo", que emplean a 21.000 personas. Las grandes superficies destacan que las rebajas, que llegarán hasta el 70%, maquillarán la subida del IVA al menos en las primeras semanas, según datos de la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución.

El sector turístico también asume la subida de un punto en el impuesto -del 7% al 8%- y, en general, no trasladará al cliente el porcentaje de incremento. Las agencias de viajes alicantinas, intermediarias en la organización de vacaciones y sometidas a los precios que les marca el tour operador, son las que lo están pasando peor. La subida del IVA se traducirá en una caída de su comisión en un momento, además, de franca paralización de los viajes, según Marisa Sempere, presidenta de la Asociación Provincial de Agencias de Viajes. En los desplazamientos ya contratados no repercutirá pero sí en caso de que aumente en los billetes de avión.

María José San Román, responsable de la Asociación Provincial de Hostelería, dijo que "la subida la asignaremos directamente al concepto de pérdidas. Los clientes no están para que se les suban los precios y resultaría complicado, por ejemplo, aplicar el incremento al precio de una cerveza que vale 1,50 euros", reiteró.

Javier García, vicepresidente de Hosbec, Asociación de Hoteles de Benidorm y la Costa Blanca, indicó que "tenemos que asumir la subida porque los precios están cerrados. No los vamos a trasladar a los clientes. Es otro hándicap porque aunque hablamos de un punto de aumento del impuesto, la repercusión para los hoteles puede ser de un quince o un veinte por ciento".

Los ciudadanos se encontrarán hoy con la gasolina más cara, con una subida del IVA del 2%, lo que retraerá los desplazamientos del turismo nacional, según Emilio Córcoles, presidente de la Asociación de Empresarios de Estaciones de Servicio. También se encarecen los panes especiales, bollería y pastelería, aunque no el pan común ni los huevos, la leche, las frutas y verduras, que seguirán tributando al 4%. Y la cadena de peluquerías "Oh, my cut!" tampoco sube el IVA.