"¿Cómo es posible que el alumnado enlace el reinado de los Reyes Católicos con la expansión europea de los Austrias tres meses después?". La reflexión se la hace el propio conseller de Educación, Alejandro Font de Mora, que ayer mismo firmaba en el DOCV la orden que introduce las nuevas materias optativas del curso que viene para los institutos.

Entre las nuevas asignaturas a elegir por los estudiantes figura la "Ampliación de Geografía e Historia de España", porque "el alumnado ignora el conjunto de hechos significativos ocurridos fuera de su ámbito", en referencia a su comunidad autónoma.

En resumen, que nuestros estudiantes dominan los hechos históricos de su comunidad, pero los del resto de España "los ha conocido de manera anecdótica o poco profunda", según contempla la nueva orden de Educación entre los argumentos expuestos para implantar esta nueva optativa. Font de Mora insiste en "poner la lupa sobre otra dimensión histórica, no abandonándose a la historia local".

La propuesta que se introduce con esta asignatura se refiere a estudiar en tercero de Secundaria una historia lineal, sobre la comprensión del proceso histórico con el antes y el después, y, en cuarto, "los hechos significativos".

Adolfo Suárez, ETA y el 23-F

Entre los hechos que a juicio del conseller no se están impartiendo en el currículum oficial que marca la legislación educativa estatal con el detalle que sería de rigor figuran, por ejemplo, Las relaciones internacionales en el franquismo, Adolfo Suárez, La batalla del Ebro, el terrorismo de ETA o El golpe de Estado del 23-F, entre otros.

La relación de los protagonistas de los hechos con sus causas y efectos son los extremos en los que la materia optativa persigue profundizar para, además, "desarrollar la capacidad crítica tras explicar los hechos con razones y argumentos". Estas serán las premisas a evaluar por parte del profesorado.

Además de poner en cuestión el modo en que se imparte la Historia de España, la nueva orden de la Conselleria de Educación introduce otras optativas novedosas que, según se indica en el preámbulo, "han surgido de las nuevas demandas e intereses entre el alumnado y sus familias" y porque así lo aconsejan las nuevas pruebas de selectividad. La materia de Inglés práctico responde enteramente a estas premisas, aunque resulte paradógico que la conselleria la implante como optativa para reforzar la lengua extranjera y, a cambio, se apunte al recorte de aulas y profesorado de inglés en las escuelas de idiomas, como avanzó ayer este diario.

La que no parece que responda ni a la demanda familiar ni a la nueva selectividad es la nueva optativa en Lengua y cultura china, aunque el conseller insiste su la "importancia económica y comercial", aunque advierte que "se propone una enseñanza académica y rigurosa". Empresa e iniciativas emprendedoras es la cuarta de las nuevas optativas a elegir el curso que viene.