El color sobre el cielo alicantino lo puso ayer la pirotecnia Hermanos Ferrández, de Beniel (Murcia), que lanzó un espectacular y emocionante castillo de fuegos artificiales desde la playa del Cocó precedido de una intensa traca luminosa desde el Paseo de Gómiz. Miles de personas contemplaron el espectáculo pirotécnico, que volverá a repetirse esta noche a cargo de la pirotecnia Caballer, de Godella, que despedirá el concurso internacional de fuegos artificiales que arrancó en la noche del viernes, un día después de la cremà.