El Gobierno valenciano considera que "no hay espacio competencial propio" parar crear una Oficina Antifraude de la Comunidad Valenciana, por lo que no aportaría"nada", sino "duplicidad, falta de eficacia y un mayor coste económico a soportar por los administrados". Así lo explica el Consell en su criterio contrario a que se tramite la proposición de ley del grupo Compromís que pide crear una institución específica para "preservar la transparencia y la integridad de las administraciones y del personal al servicio del sector público" en la Comunitat Valenciana.