El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, inauguró ayer la estación subterránea del tranvía en la Plaza de los Luceros, un hito arquitectónico que, además, permite que el centro de Alicante quede conectado de forma directa con Benidorm y la Playa de San Juan sin necesidad de hacer trasbordos, como sucedía hasta ahora en el apeadero de Lucentum y en la estación de El Campello.

El tranvía partirá de Luceros cada media hora y tras llegar subterráneo hasta la estación del Museo Arqueológico después de pasar por la de Mercado (Alicante cuenta ya con tres estaciones de metro) seguirá camino en superficie por la Albufereta, Cabo Huertas y la Playa de San Juan hasta la Plaza de A Coruña, desde donde comenzará el retorno por el Campo de Golf. Ferrocarriles de la Generalitat (FGV) mantiene operativo el ramal Sangueta-Plaza del Mar que permite a los viajeros llegar hasta la playa del Postiguet. La apertura de Luceros amplía hasta la plaza el servicio de las tres líneas del TRAM; la de la Playa de San Juan (4); Amerador-El Campello (3) y Benidorm (1).

La estación de Luceros tiene una superficie de 2.200 m2 repartidos en dos niveles (vestíbulo y andenes) a 18 metros de profundidad. Cuenta con cinco accesos: avenidas Alfonso El Sabio, Estación, General Marvá, Federico Soto y desde la propia plaza gracias a un ascensor panorámico. El diseño es del arquitecto Javier García Solera que apostó por una estación subterránea con andén central, ajustada bajo la cruz que forman los dos ejes principales de la ciudad: el que definen las avenidas Alfonso El Sabio y Estación y el de los accesos por Marvá y Soto.

El ascensor se sitúa en el centro de un gran patio inglés con lucernario que permite que la luz natural llegue al corazón del vestíbulo de la estación donde hay una fuente, zonas ajardinadas y en el futuro tiendas y locales de restauración.

Paralelo al vestíbulo, por debajo de la avenida de la Estación, se ubica un párking sin columnas de 500 plazas que se pretende inaugurar a finales de año. Debajo están los andenes que, mientras llega el tranvía hasta la futura estación intermodal del AVE, servirán para que los trenes cambien de sentido. El coste del kilómetro de vías entre Mercado Central y la estación de Luceros alcanza los 70 millones de euros. Esta estación, la citada del Mercado, la del Museo Arqueológico y en un futuro la que se ubique en la intermodal del AVE serán privatizadas por FGV para contar con liquidez para seguir extendiendo el tranvía hacia el aeropuerto y formarán las cuatro paradas del metro de Alicante.

La construcción del tranvía comenzó en 2004 y la Generalitat ha invertido en la misma 1.300 millones de euros. En estos momentos la red del TRAM está compuesta por 100 kilómetros de trazado ferroviario y estaciones accesibles. El proyecto persigue ordenar la ciudad de Alicante en torno a tres ejes: hacia el norte, comunicando la ciudad con el frente costero hasta Altea; hacia el sur hasta el aeropuerto de El Altet y hacia el interior (Línea 2) que dará servicio a partir de 2011 a los barrios del norte para llegar a la Universidad y San Vicente.

A la inauguración acudieron la alcaldesa Castedo, el presidente de la Diputación, José Joaquín Ripoll, la presidenta de las Cortes, Milagrosa Martínez, los consellers Mario Flores y Angélica Such, Luisa Pastor, alcaldesa de San Vicente y viuda de García Antón, el presidente de Coepa, Martínez Berna, el de Fopa, Peláez Robles, y empresarios, concejales y diputados del PP, entre otros.