Una juez de instrucción de Valencia acordó ayer el archivo de la denuncia presentada por el PP sobre un posible caso de espionaje por parte de la Policía Nacional a las puertas de su sede en el cap i casal al considerar que el servicio prestado por los agentes "no guardaba relación alguna con el PP ni con sus integrantes ni tenía como finalidad la grabación y escucha ilegal" de sus miembros. Así lo dio el delegado del Gobierno en la Comunidad, Ricardo Peralta, que, a la vez, expresó su deseo de que esta respuesta judicial "dé cumplida satisfacción a quienes reclamaban el derecho a la tutela judicial y afirmaban que confiaban en la justicia". Peralta censuró el "cúmulo de disparates" esgrimidos por el PP para una denuncia "carente de fundamento" y criticó la "utilización y manipulación partidista, sectaria y profundamente irresponsable de la actuación profesional de la Policía Local".

El secretario general del PP, Antonio Clemente, anunció ayer que recurrirán el archivo para que se investigue "por qué la Policía Nacional estableció un dispositivo de vigilancia frente a la sede del PP y quién dio la orden".