Muchas veces cuando nos encontramos por la calle a una persona ciega acompañada por un

perro no nos damos cuenta del trabajo que habrá llevado el adiestrar a ese animal para que sea los ojos de su amo. Una labor que realizan unos educadores en la escuela que tiene la Fundación ONCE Perro Guía en Madrid. Ayer, dos de estas instructoras estuvieron en Alicante, en la avenida Óscar Esplá, con dos perros labradores -Hielo y Bora- que mostraron los ejercicios que han aprendido con el objetivo de evitar los obtáculos y así guiar perfectamente a sus propietarios. Porque después de un periodo de formación, estos perros son entregados, gratuitamente, a personas con discapacidad visual. De modo que ellos permiten "la total autonomía de sus dueños", expresó el alicantino Luis Picó, presidente de la ONCE en la Comunidad Valenciana. Ayer estaba muy satisfecho porque este acto se celebraba en su ciudad.

Muchas personas disfrutaron de la exhibición y conocieron de cerca la importante misión que tiene estos canes. Además algunos de los asistentes participaron en este acto tapándose los ojos con un antifaz y dejándose guiar por Hielo y Bora.