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El presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, del PP, ha considerado hoy que el concejal de Atención Urbana de la capital y compañero de partido, Andrés Llorens, debió "morderse la lengua" antes de emitir sus declaraciones sobre la planta de residuos de Fontcalent.

Ante la queja de los vecinos de la partida de El Rebolledo por los malos olores provenientes de la instalación, Llorens presentó un estudio que apunta que las emisiones están "más de mil veces por debajo de los límites" y achacó las posibles molestias a otro vertedero más lejano, en el término de Elche, o a una vaquería.

Preguntado por esas palabras, Ripoll ha admitido que no encuentra "adjetivo para calificar esa declaración" y que cualquiera que se le ocurriera "se quedaría corto".

"Es como si a uno le dicen que los malos olores en tu casa en la Rambla (centro de Alicante) se deben a que en San Vicente del Raspeig ha pasado cualquier cosa...", ha comentado.

"Andrés Llorens es un buen amigo mío y no quiero ponerle adjetivo a esas declaraciones, pero la verdad es que a veces decimos cosas que mejor sería que nos mordiéramos la lengua antes", ha proseguido.

Por otro lado, también ha sido preguntado sobre la falta de acuerdo para que el Patronato de Turismo Costa Blanca, dependiente de la Diputación, se adhiriera este año a Turespaña y la Conselleria de Turismo para la promoción del sector.

Ripoll ha comentado que al final no sabe que problema ha habido ya que en un principio se pensaba que las tres administraciones fueran "conjuntamente".

Ha recordado que el pasado año sí hubo una promoción conjunta en la que las tres partes se "congratularon" y ha dicho que "a ver si el año que viene nos congratulamos otra vez" ya que le hubiera gustado que hubieran ido "todos juntos".

A pesar de esta falta de acuerdo, que Turespaña achacó ayer a las diferencias entre la Conselleria y la Diputación, Ripoll ha afirmado que lo importante es que el dinero que iba a aportar la institución que preside seguirá intacta y que, por lo tanto, se invertirá de acuerdo con las necesidades de las dos patronales hoteleras de la provincia, Hosbec y Apha.

De esta manera, el dinero del Patronato se dirigirá a campañas turísticas en el resto de España, así como a Alemania y, sobre todo, el Reino Unido, el principal mercado emisor de turistas.

Ripoll ha puesto de manifiesto que el sector turístico actúa de verdadero "colchón" económico y ha permitido la mejora de las últimas tasas de empleo en la provincia, después de un periodo de reconversión a lo largo de los últimos años.