Mientras la dirección nacional del PP recurría ayer el auto de inhibición del juez Pedreira sobre el caso de los trajes de la red Gürtel, el líder de los populares, Mariano Rajoy, volvía a respaldar al presidente de la Generalitat Valenciana, aunque esta vez con matices a expensas de lo que puedan resolver los tribunales. "Francisco Camps es inocente mientras no se demuestre lo contrario", afirmó Rajoy en Almería. Después de varios días de silencio sobre el escándalo de la trama corrupta, el presidente del PP añadió que respetará y acatará "siempre" las decisiones de los tribunales a pesar de que puede haber algunas que le gusten "más o menos".

"Respeto y acato lo que ha dicho el Tribunal Supremo y lo que diga cualquier otro tribunal. Eso es bueno que lo hagamos todos porque en eso están las bases de las reglas de juego de nuestra democracia", subrayó horas después de que su dirección haya cuestionado la instrucción del caso efectuada por Garzón a raíz de dos providencias de reclamación de información al Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) dictadas por el Supremo.

Al día siguiente de que Camps proclamara su "absoluta inocencia" y lamentara que se "hayan ocultado pruebas exculpatorias evidentes", Rajoy declaró que esperará a ver lo que digan los tribunales, al tiempo que recalcó que él cree que Camps es "inocente". "Mientras no se demuestre lo contrario, para mí el señor Camps es inocente", apostilló.

Y al mismo tiempo que Rajoy introducía cautelas en sus palabras de apoyo a Camps, el PP recurría el auto en el que el instructor del caso Gürtel en el TSJM, Antonio Pedreira, se inhibió de parte de la causa en favor del Tribunal Superior de Valencia, argumentando que el juez se ha equivocado al guiarse por la "visión parcial" de la Fiscalía. En el recurso de reforma, el PP pide a Pedreira que acuerde la nulidad de los autos del pasado 25 de mayo y 1 de junio, ya que sostiene que no existen datos nuevos de los que se pueda deducir ninguna conexión entre la causa investigada por el TSJCV y las actuaciones del tribunal de Madrid.

Además de insistir en que los hechos que imputa el fiscal no están acreditados, el PP, que ejerce la acusación popular, afirma que tampoco se ha acreditado la participación en los mismos de Camps.

El recurso cuestiona la actuación de la Fiscalía, que, a juicio del PP, "perdiendo la imparcialidad que debería regir su actuación", "presenta una visión fáctica, parcial, subjetiva e incluso tendenciosa", que ha provocado una "desacertada respuesta del instructor".