La Universidad de Alicante (UA) se ha visto abocada a cerrar el Colegio Mayor, que se encuentra dentro del Campus, por problemas económicos derivados de la escasez de usuarios que ha venido experimentando en los últimos años. Este curso, por ejemplo, cuenta con 40 plazas ocupadas de las 180 de las que dispone. La medida se hará efectiva el 30 de septiembre.

A través de un comunicado emitido en nombre de la Fundación Colegio Mayor Universitario, que rige este centro y cuyos patronos son la Universidad y Caja Mediterráneo, se ha justificado la decisión apuntando a que en los últimos años "se ha producido una situación de obsolescencia de las instalaciones que hace necesaria una reforma integral de estas infraestructuras" y su alto coste ha llevado a la decisión del cerrojazo. Sin embargo, la Universidad argumenta en el mismo documento que destinará el edificio a un uso docente. La pregunta es si ese personal universitario utilizará el inmueble en estado "obsoleto".

No obstante, José Vicente Cabezuelo, encargado de dar la noticia a los cerca de 20 empleados que trabajan en el centro -contando tanto a los asalariados directos del Colegio como a los de las contratas de limpieza y comedor- en nombre del patronato de la Fundación, señaló a este diario que es evidente que la falta de presupuesto para hacer estas adecuaciones tiene que ver con los pocos residentes.

Cabezuelo, vicerrector de Alumnado de la Universidad, se reunió ayer por la tarde tanto con los trabajadores como con los alumnos. El encuentro más duro, tal y como él mismo explica, fue con el primer grupo, dada la incertidumbre de su situación futura. "Me han preguntado sobre la posibilidad de recolocación, pero yo, de momento, no les puedo contestar a eso. Es algo que se tiene que negociar y decidir entre ambos patronos. Lo que sí les he querido dejar claro es que se luchará por mantener sus derechos laborales al máximo".

Los residentes, que pagan una media de 600 y 700 euros por habitación, encontrarán menos problemas de reubicación. Según el Patronato, se ha realizado un estudio previo de la oferta externa existente de alojamientos en residencias para universitarios y, de momento, ha quedado comprobada su amplitud y suficiencia. Por parte de CAM, en el comunicado antes citado, se informa de que desviará los fondos que venía dedicando al mantenimiento de este centro a becas universitarias u otras acciones de promoción en la Universidad.

Loreto Bernabéu, una trabajadora afectada, comentó que ya desde el año pasado el Colegio Mayor, con más de 20 años de historia, viene experimentando pérdidas. Desde su punto de vista, "desde que el año pasado metieron aquí a personal del edificio de Ciencias Sociales en habitaciones vacías, se empezó a correr la voz de las deficiencias y de la escasez de estudiantes. Quizá ese ha sido el detonante para el cierre del colegio", declaró.