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El plan de ajuste del Gobierno, que plantea un recorte del gasto de las administraciones de más de 10.000 millones de euros, no afectará únicamente a la Generalitat -que percibirá 200 millones menos- sino también a la Diputación y a los municipios, según los datos de este periódico. La corporación provincial calcula, incluso, que, a final del ejercicio cuando tenga que hacer cuentas con Madrid, podría terminar haciendo frente a un recorte de hasta el 20% de los fondos que ingresa del Estado, según explicó el presidente Joaquín Ripoll y la diputada de Hacienda, Mari Carmen Jiménez, que, además, alertó que, con toda seguridad, el plan de ajuste afectará a las arcas locales, ya en una situación crítica y sin recursos para afrontar el gasto corriente.
Como se recordará, la Diputación, una de las que se vería más afectada por el volumen de población de Alicante, ya ha tenido que "tragar" con un expediente de reintegro de fondos de 16 millones de euros al Estado correspondientes a la liquidación de 2008. En 2009, las estimaciones apuntaban a un "agujero" de 2,5 millones sobre las previsiones iniciales, que la Diputación tuvo que tapar con su propio remanente de tesorería. El presupuesto de este año, validado el pasado mes de diciembre sin votos en contra, ya registró un recorte del 16% en las aportaciones del Estado que, además c0n este nuevo tijeretazo, podría llegar al 20%, estiman desde la institución provincial. "Yo firmaría ese porcentaje, pero creo que nos va a afectar más", advirtió el titular de la Diputación que, en todo caso, reclamó que la reducción de gasto del Gobierno "no afecte a ni a la remodelación de El Altet aeropuerto, ni al AVE, y ni a la parte final de la autovía central".
Por su parte, el vicepresidente y titular de Economía, Gerardo Camps, cargó contra el Gobierno al que acusó de "traer consigo el despilfarro y aun así ahora intenta dar lecciones a quienes de verdad están haciendo las cosas bien, que son las autonomías".
Déficit histórico
"El Gobierno de Zapatero -recalcó- es el que más ha aumentado el déficit en la historia reciente de la democracia española y paradójicamente quiere exigir recortes de gasto y que se aprieten el cinturón las comunidades, que son las que soportamos el gasto social, sanidad, educación y bienestar social", apuntó Gerardo Camps. Mientras, por contra, la portavoz socialista de Economía, Cristina Moreno, cargó contra el Consell y criticó "la desfachatez" del titular de Hacienda. "Se atreve a decir que la Generalitat ha hecho los deberes y se atreve a abstenerse en la votación del plan de austeridad para las instituciones públicas cuando en la Comunidad los indicadores económicos le dan calabazas día tras día con derroche y falta de control", concluyó.
