La Comunidad Valenciana está a punto de entrar en otro registro negativo en materia económica. En estos momentos, el número de pensionistas y parados -el total de receptores de una paga del Estado- prácticamente iguala al de trabajadores afiliados a la Seguridad Social. Es decir, que si existiera un sistema de protección social estrictamente valenciano, cada persona ocupada se encargaría de mantenerse a sí mismo y a otra que no trabaja.

La Comunidad Valenciana tenía en febrero 1.707.550 cotizantes ocupados. Frente a esta cifra, 1.658.833 habitantes depende de algún tipo de prestación estatal. Sólo hay 48.717 pagadores más que receptores de pensiones. Esto significa que la Comunidad está a punto de superar la proporción de un de un dependiente de prestación por un cotizante a la Seguridad Social. Concretamente, pensionistas y parados suponen un 97% sobre el total de trabajadores.

La crisis económica, con un especial incremento del paro en Alicante, Valencia y Castellón, ha elevado la incertidumbre sobre la viabilidad del sistema de pensiones. En la Comunidad Valenciana hay ahora mismo más de medio millón de beneficiarios de sueldo por desempleo. Pero además, 872.500 personas reciben pensiones contributivas; 46.599 obtienen pensiones no contributivas; hay 1.473 pensionistas asistenciales; 3.261 beneficiarios de prestaciones para la integración de discapacitados (Lismi) y 232.700 por viudedad.

La proporción de la Comunidad, pese a lo negativo de los datos, no es de las peores en el conjunto de España. En Asturias y en Galicia, por ejemplo, con un envejecimiento de la población muy destacable y también bajo los efectos de la crisis, el número de trabajadores está bastante por debajo del de receptores de prestación.

El caso más problemático es el asturiano, donde ya hay 63.877 habitantes (117%) cobrando pensiones o prestaciones por desempleo de las arcas del Estado que cotizantes a la Seguridad Social. En lado contrario, la Comunidad de Madrid es la que más contribuyen a la caja única para el sostén de pensionistas y parados de toda España. Los perceptores de rentas en Madrid se sitúan en el 56% del número de cotizantes.

Peligrosa situación

Así las cosas, la situación general comienza a acercarse peligrosamente a la proporción de un trabajador sosteniendo a un receptor de prestación social. Concretamente, 17.572.351 trabajadores financian las rentas que llegan a 14,2 millones de españoles. Evidentemente, los dos millones de parados que ha generado la crisis ha apretado la proporción entre cotizantes y receptores los últimos meses.