La aparición de larvas del temido mejillón cebra en la cuenca del Júcar ha encendido la alarma entre las comunidades de regantes de Alicante, que temen que una extensión del mejillón a la provincia pueda acabar con la modernización de los regadíos llevada a cabo en los últimos 25 años, el 85% entre 1999 y 2009. En concreto, con las 92.000 hectáreas con sistema de "riego por goteo" cuya modernización supuso una inversión en torno a los 350 millones de euros, financiados por los agricultores con ayudas del Consell y el Gobierno.

Aunque es un molusco bivalvo (dos conchas) como los apreciados mejillones (del que copia el nombre), las ostras o las navajas, el mejillón cebra ni es originario de Galicia ni, mucho menos, es pariente de las cebras del parque nacional del Serengeti (Tanzania) que tan acostumbrados estamos a contemplar en los documentales de la La 2. El pequeño mejillón cebra, convertido en plaga bíblica para los agricultores desde que se detectó próximo a la desembocadura del Ebro en 2001, se identificó a finales del siglo XVIII en el mar Caspio, un lago ubicado entre Europa y Asia donde los naturalistas lo bautizaron como mejillón por su gran parecido con los moluscos que conocemos.

No es comestible y, hasta ahora, al dichoso mejillón sólo se le conoce por su su voraz apetito -acaba con el fitoplacton en las aguas continentales, algo que reduce la calidad de agua-, y por su capacidad para tapizar y obstruir todo tipo de conducciones hidráulicas, turbinas, desagües, y depósitos agrícolas. Su detección en la cuenca del Júcar ha encendido todas las alarmas en el sector agrícola de la provincia. Tanto las aguas del Tajo que llegan al Segura como las del futuro trasvase Júcar-Vinalopó utilizan conducciones del Júcar para llegar hasta la provincia y Murcia.

En estos momentos, sólo una comunidad de regantes, de Riegos de Levante (pionera en España en blindarse ante el "ataque" del mejillón), cuenta con sistemas de protección para unas mil hectáreas en la provincia, según recuerda Ángel Urbina, portavoz de Riegos de Levante, quien alerta de que "si no se toman medidas en unos años estaremos abocados a la ruina", subraya el portavoz de Riegos de Levante.

Un auténtico desastre

Ángel Urbina advierte de que "el que se hayan detectado larvas del mejillón en el Júcar y en los alrededores del embalse de Alarcón, nos tiene preocupar, porque seguro que acabará llegando a la provincia por el trasvase Tajo-Segura o el futuro Júcar-Vinalopó. Un auténtico desastre, sino se toman medidas ya".

Las últimas prospecciones realizadas por la Confederación Hidrográfica del Júcar en los embalses administrados por el organismo de cuenca para determinar la presencia del mejillón cebra mantienen como únicos "focos calientes", con ejemplares adultos de esta especie, los del pantano de Sitjar, en el río Mijares -ampliado ahora hasta su desembocadura- y el embalse de Forata, donde la plaga, que se creía desaparecida, ha vuelto a dar señales de vida. Sin embargo, el Medio Ambiente ha detectado larvas de mejillón cebra en otros embalses desde los que puede colonizar por completo el río Júcar, el más importante de la demarcación hidrográfica y con conexiones a la Albufera de Valencia. La CHJ ya había detectado en 2008 larvas en el pantano de Alarcón, aunque no se ha encontrado ningún adulto.

Riegos de Levante de Elche fue la primera agrupación agrícola de la Comunidad Valenciana en contar, desde 2008, con una estación de filtrado que garantiza la eliminación del temido mejillón cebra. Tras su aparición, los servicios técnicos de Riegos de Levante comenzaron a estudiar fórmulas para evitar que las larvas de mejillón pudieran penetrar en las tuberías que abastecen a los campos ilicitanos. "Viajamos a Israel, la región de los Grandes Lagos en Estados Unidos, que está llena de mejillón cebra, al Ebro y al final nos gastamos medio millón de euros en blindarnos contra este molusco que puede ser letal. Como no se tomen medidas podemos estar ante una plaga como la del picudo rojo, un escarabajo que acaba con las palmeras", alerta Ángel Urbina.

La estación de filtrado se construyó en el cuarto canal de Levante y La Peña y se instaló en dos partes. La primera de 6 filtros de 125 micras, y la segunda de las etapas tiene el triple de filtros y además son de 34 micras. "Las larvas de mejillón cebra no pasen los filtros y, por tanto, no llegan a las tuberías que unen la estación de filtrado con las parcelas individuales de cada uno de los agricultores", explicó Urbina.

La provincia de Alicante ha modernizado en los últimos 25 años (1985-2010) un total de 92.000 hectáreas de cultivos instalando sistemas de riego por goteo. Una cantidad que representa el 78% de la superficie total de riego (125.000 hectáreas), el porcentaje más alto de España, según los datos de la Conselleria de Agricultura y el Ministerio de Agricultura conjuntamente con los regantes cerca de 350 millones de euros. La Comunidad Valenciana es líder en reutilización de agua depurada (46%) en España, 30 puntos más que la siguiente (Andalucía).

Una hembra puede liberar 1,5 millones de huevos al año

La vía más común de entrada del mejillón cebra en un ecosistema es a través de una suelta de agua con larvas, bien transportada en el casco de una embarcación o en algún tipo de recipiente, cebo vivo para la pesca o, incluso, en las patas de algunas aves marinas. Una vez introducido puede ocurrir que el molusco se adapte perfectamente al medio o, incluso, que no logre sobrevivir y desaparezca. Los científicos observaron que en el Ebro (curiosamente en la zona de Fleix donde estaba previsto que arrancara el derogado trasvase), se ha adaptado perfectamente, constituyendo una auténtica plaga.

Los primeros datos de la presencia del molusco en el Ebro se conocieron en septiembre de 2001, cuando se llegaron a contabilizar 500 ejemplares por metro cuadrado. Las larvas tienen una gran capacidad de dispersión y crecen muy rápido hasta el punto de que pueden reproducirse una vez al mes. En este sentido, existen referencias de que en la zona de los Grandes Lagos de EE UU, en uno de ellos se pasó de 200 a 4.000 mejillones por metro cuadrado en tan sólo un año. Las hembras alcanza su madurez sexual durante el primer año de vida y pueden liberar 1,5 millones de huevos al año.

Tanto en Estados Unidos como en Europa se han realizado decenas de trabajos para profundizar en la biología y ecología del mejillón cebra, sobre todo por los daños ecológicos y ambientales que produce.

Su capacidad de adaptación al medio acuático es alucinante como lo demuestra que puedan soportar temperaturas del agua entre cero y treinta y dos grados. Fuera del agua sólo durarían entre ocho y diez días. F. J. B.