Después de siete años consecutivos al frente del área municipal de Urbanismo -los dos últimos ya como alcaldesa-, Sonia Castedo ha decidido delegar la competencia más controvertida del Ayuntamiento. El elegido es el abogado urbanista Alfonso Mendoza Quesada, quien en los próximos días será nombrado delegado de Urbanismo para asumir la dirección política del "día a día" de un área que está a punto de culminar la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y a expensas de la suspensión cautelar del Plan de Rabasa, por citar sólo dos de sus asuntos de más relevancia.

Experto en planeamiento y disciplina urbanística, Mendoza Quesada es Licenciado en Derecho por la Universidad de Alcalá de Henares y Máster en Asesoría Fiscal por el Centro de Estudios Financieros. Responsable del bufete Mendoza Villar de Alicante y miembro del actual equipo redactor de la revisión del PGOU, el próximo delegado municipal de Urbanismo ha trabajado en diferentes desarrollos territoriales de otros municipios de la provincia como Busot, Teulada y Monforte del Cid.

Su nombramiento se hará oficial "en un plazo de una a tres semanas", explicaron ayer fuentes municipales, que destacaron la decisión de Castedo de delegar la responsabilidad del área "en un profesional de reconocido prestigio y capacidad", que también tiene conocimiento directo de las propuestas del nuevo Plan General para el desarrollo de la ciudad. No en vano, Mendoza es el responsable jurídico del equipo técnico Laboratorio de Proyectos S. L. P. que, bajo la dirección de Jesús Quesada, culmina los últimos retoques a la revisión del Plan General que el equipo de gobierno pretende llevar al pleno municipal de marzo o abril.

El inminente nombramiento de Mendoza no afectará, según las mismas fuentes, al organigrama de la Gerencia de Urbanismo, cuyo máximo responsable, Enrique Sanus, se convertirá en interlocutor directo del nuevo delegado municipal. Con este nombramiento, Castedo también agota el cupo máximo de tres delegados que le permite la Ley de Grandes Ciudades, con arreglo a la población de Alicante. Los otros dos delegados -cuyo rango institucional supera incluso a los concejales electos que no ocupan tenencia de Alcaldía- son Sonia Alegría, en Presidencia; y Miguel Cabeza en el Patronato de la Vivienda tras su accidentado paso por el área de Deportes. Los dos también forman parte de la Junta de Gobierno Local, junto a la alcaldesa y los seis ediles electos que son tenientes de alcalde.