Una familia de Las Palmas de Gran Canaria ha denunciado ante el Defensor del Pueblo y la Justicia el trato "inhumano" que ha recibido su hijo, de 22 años y enfermo de esquizofrenia y trastorno bipolar, en el hospital psiquiátrico penitenciario de Alicante, donde cumple condena. "Fue duro, durísimo, saber que mi hijo era esquizofrénico y que tenía un trastorno bipolar, pero no vamos a permitir que le traten como a un perro". Juan Hernández y Fátima del Carmen Santana, padres de Rubén, el joven internado, interpusieron la denuncia el 5 octubre después de que su hijo les llamase por teléfono "con voz desesperada diciéndonos que en el psiquiátrico le iban a matar".

Los padres se desplazaron a Alicante y cuando lograron ver a Rubén en un vis a vis se encontraron con que tenía "contusiones, desgarros, hematomas en espalda, cadera, muslos y glúteos". Sus padres aseguran que el joven no se pudo infligir los golpes porque tiene moratones hasta en las "nalgas". E indican que en algunos se ve perfectamente la forma de un palo.

Agresiones

Según consta en la denuncia, el joven fue pegado con "palos" mientras tenía la cabeza tapada con una "manta". Después, le "arrastraron por el pasillo hasta una celda de inmovilización". Los padres relatan que los responsables del centro les explicaron que "quizá" los funcionarios se habían "excedido" con el joven. "Nos pidieron disculpas y nos dijeron que tomarían medidas", añade. Pero los hematomas y la versión de Rubén, que según los padres "nunca ha mentido" porque no es consciente del "daño" que causa, les impulsó a denunciar el caso en el juzgado de guardia de Alicante y ante el Defensor del Pueblo.

Este diario trató de ponerse en contacto ayer con el director del Psiquiátrico para conocer su versión de los hechos, pero no obtuvo respuesta.