Las alcaldesas de Alicante y Valencia, Sonia Castedo y Rita Barberá; el de Castellón Alberto Fabra; los presidentes de las diputaciones de Valencia y Castellón, Alfonso Rus y Carlos Fabra,... Como es costumbre en estos casos y en otros de menos gravedad, la plana mayor del campismo salió ayer en defensa del presidente de la Generalitat y de su partido. Francisco Camps está en el momento más crítico de su carrera política, y sus correligionarios lo saben.

Fabra volvió a ser el que más lejos llegó. Primero, agradeció "personalmente" el apoyo de Rajoy al jefe del Consell, a continuación discrepó de Ripoll, del que dijo que "está en otra onda", y de su petición de un gabinete de crisis. Y sobre las sombras de duda que arrojó Fraga sobre Camps, el líder castellonense lo consideró "una frivolidad" y animó "a retirarse" al presidente fundador del PP.

Camino de Valencia para ofrecer una conferencia sobre "El presente y futuro de Alicante", Castedo reiteró su apoyo al jefe del Consell, "ayer, hoy y siempre", y agregó que el apoyo ofrecido por Rajoy "es el mismo respaldo de la inmensa mayoría del partido en la Comunidad Valenciana y del conjunto de España". "No podía ser de otra manera", agregó la alcaldesa, "porque, quienes le conocemos, sabemos que Camps es una persona de una enorme integridad moral, como persona y como político".

Por su parte, Barberá agradeció "de corazón" las "palabras de cariño" de Fraga hacia ella y reiteró su "apoyo total y rotundo" a Camps, del que aseguró que "es el mejor presidente que puede haber".