Almendras y más almendras. Montañas de almendras se apilan en la Cooperativa Frutos Secos del Mañán de Pinoso mientras camiones, tractores y furgonetas procedentes de siete provincias hacen cola todos los días para abocar el preciado fruto. Ni los socios más viejos recuerdan una cosecha tan generosa como la de este año.

Las óptimas condiciones meteorológicas han obrado el prodigio. "Ha llovido mucho cuando tenía que llover, ha hecho mucho calor justo en los días en los que tenía que hacerlo y mucho frío en el momento adecuado", explica el secretario de la Cooperativa, Alfredo Sogorb Pérez. El resultado ha sido una campaña con superproducción. La mayor de la historia. Y si las estimaciones no fallan y todo parece indicar que no van a fallar, conseguirá doblar a la anterior, en la que se recogieron 7 millones de kilos. En esta ocasión serán 14 millones con una facturación de 9 millones de euros a repartir entre los 4.500 socios que cultivan 52.000 hectáreas. Pero todo no podían ser buenas noticias. La oferta es muy alta pero la demanda muy baja y los precios han experimentado una drástica caída.

Dos son los motivos que han propiciado este fenómeno. La crisis ha ralentizado el consumo de almendra en el sector turronero. A estas alturas debería ser un 50% superior al que está siendo. El segundo enemigo es la almendra americana de la que nuestra provincia, paradójicamente, es la primera importadora y exportadora nacional. No posee las extraordinarias propiedades de la española y su consumo tiene una vida más corta. Pero los productores norteamericanos están haciendo su particular agosto en septiembre con precios bajísimos con los que resulta imposible competir.

Frente a grandes problemas grandes soluciones y la conquista de nuevos mercados es la alternativa más viable. Así lo considera Antonio López Albert, el presidente de Frutos Secos del Mañán, que está empeñado en potenciar la línea exportadora para mantener el negocio en tiempos difíciles. El objetivo es consolidar las ventas en Canadá y la zona euro para lanzarse a la "conquista" de los consumidores de Rusia, China, Japón e India. Y mientras tanto 100.000 kilos de almendra llegan cada día a Pinoso. Montañas de almendras en busca de mercados dispuestos a apreciar su gran calidad.