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a Concejalía de Cultura destinará 600.000 euros en la rehabilitación de las dos torres de la Huerta de propiedad municipal y tiene previsto reconvertir una de ellas en un espacio polivalente para actos culturales y vecinales y para Centro de Interpretación de las Torres. El edil de Cultura señaló que en cuatro meses empezarán las obras y en el primer trimestre de 2009 ya estarán restauradas.

Miguel Valor, el arqueólogo y técnico conservador Pablo Rosser y el arquitecto Marius Bevià presentaron ayer los proyectos de rehabilitación de estas edificaciones, denominadas Ferrer y Sarrió, que datan del siglo XVI y que están catalogadas como Bien de Interés Cultural (BIC);.

Ambos baluartes se encuentran en la Condomina. La Torre Ferrer ocupa un minúsculo solar bordeado de edificios de viviendas en la calle Licia Calderón. El proyecto para rehabilitarla prevé rodearla de arbolado para aislarla de las construcciones que la rodean. La Torre Sarrió está situada en el centro de la rotonda en la que arranca la avenida de Miriam Blasco y tiene una vivienda adosada que se destinará a actividades culturales y vecinales y a centro de interpretación de las Torres de la Huerta. Ambas se integran en el conjunto de Torres Defensivas de la Huerta, que suman 19 en el término municipal, aunque de alguna quedan sólo restos. De todas ellas sólo una, la torre Conde, propiedad de una mercantil participada por Enrique Ortiz, ha sido restaurada, aunque ya se anuncia la próxima rehabilitación de la torre Villagarcía o Capitán Boacio, propiedad de Vicente Sala, presidente de la CAM.

El presupuesto del proyecto de restauración de la Torre Sarrió y edificación anexa asciende a 420.839 euros. En cuanto a la Torre Ferrer, su presupuesto es de 127.379. Ambos proyectos los redactó Marius Beviá y cuentan ya con la autorización de Cultura.