El número de rumanos con tarjeta de residencia en España casi se ha duplicado desde que Rumanía ingresara en la Unión Europea el 1 de enero, al pasar de 264.928 ciudadanos con certificado de registro en vigor a 560.670.
Según los últimos datos del Ministerio de Trabajo, a 30 de septiembre, los ciudadanos rumanos, tras los marroquíes, fueron el colectivo de extranjeros con certificado de registro en vigor más numeroso.
En total, más de 3,7 millones de extranjeros tenían tarjeta de residencia, lo que supone un aumento del 5,7 por ciento respecto al segundo trimestre del año y un incremento del 23,8 por ciento (719.148 personas más); en comparación con diciembre de 2006.
Al término de septiembre, y según constata el Ministerio de Trabajo, el colectivo mayoritario de extranjeros con tarjeta de residencia en vigor fue el marroquí, con 625.123 personas, seguido del rumano, 505.670, que, por segundo trimestre del año consecutivo, se sitúa por delante de la población ecuatoriana, con 387.047 ciudadanos.
En el tercer trimestre del año, entre junio y septiembre, los mayores incrementos numéricos referidos a las nacionalidades con más de 20.000 personas en España han correspondido a los rumanos (101.066 personas más);, los marroquíes (21.437);, los búlgaros (14.932);, los portugueses (8.783); y los italianos (7.834);.
La población rumana también ha registrado el mayor crecimiento porcentual respecto al segundo trimestre del año, entre los meses de abril y junio, con un 24,9 por ciento, seguido del colectivo búlgaro (15,1 por ciento);, polaco (11,1 por ciento); y del portugués (10,2 por ciento);.
El número de ecuatorianos con tarjeta de residencia en vigor a 30 de septiembre ha descendido en 10.383 personas respecto al segundo trimestre del año.
Por comunidades autónomas, Cataluña, Madrid, Valencia y Andalucía han agrupado al 64,8 por ciento de los extranjeros con certificado de registro.
Por sexos, el 54,3 por ciento fueron varones y el 45,6 por ciento mujeres extranjeras con tarjeta de residencia.
A excepción de Asturias, La Coruña y Melilla, en el resto de provincias la mayoría de residentes eran varones.
En cuanto a la media de edad, los extranjeros con autorización de residencia en vigor, sean comunitarios o no comunitarios, fue de 33 años.
Además, de los más de 3,7 millones de extranjeros con tarjeta de residencia en vigor, el 83,3 por ciento tenía entre 16 y 64 años, mientras que 471.352, el 12,6 por ciento, eran menores de 16 años y 153.202, más del 4 por ciento, era mayor de 64 años.
Barcelona y Madrid fueron las provincias con un número más elevado de extranjeros menores de 16 años (79.050 y 73.961 respectivamente);, así como de ciudadanos de entre 16 y 64 años (443.873 y 562.407, respectivamente);, mientras que Alicante (40.462); y Málaga (20.205); registraron más extranjeros mayores de 64 años.
Los datos del Ministerio de Trabajo también señalan que a 30 de septiembre 178.433 extranjeros habían nacido en España, lo que supone el 4,7 por ciento del total, de los que 56.620 residían en Cataluña y 30.547 en Madrid.
Por continente, de los extranjeros nacidos en España, el 59,8 por ciento es africano, el 20,7 por ciento es de la Europa comunitaria y el 12,6 por ciento es asiático.
