L os embalses alicantinos adscritos a la cuenca del Júcar -Guadalest, Beniarrés y Amadorio- han conseguido almacenar en un mes 11 hectómetros cúbicos de agua (caudal necesario para cubrir durante un año el abastecimiento de Benidorm); y han salido de la situación de «emergencia» en la que se encontraban, como el resto de los del Júcar, debido al ciclo seco que sacudía la cuenca desde 2005 y que mantiene la alerta. Los tres embalses almacenan en estos momentos un total de 37 hm 3 , caudal que unido a la recarga de los acuíferos garantiza el abastecimiento urbano de las comarcas de l$27Alcoi´à, Marina Alta y Marina Baixa para dos años, independientemente de la lluvia que caiga sobre los municipios.

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, Juan José Moragues, confirmó anteayer, por su parte, que tanto los embalses, como los acuíferos y la Albufera de Valencia han finalizado el año hidrológico mucho mejor de lo que se esperaba y afrontan 2008 con buenas condiciones, aunque volvió a reclamar prudencia en el consumo de agua.

La excelente situación del Júcar no es trasladable a la del Segura, donde los embalses están al 12%, ni al complejo Entrepeñas-Buendía - puerta de arranque del trasvase Tajo-Segura - que apenas ha recibido precipitaciones durante octubre, ya que éstas se concentraron sobre la franja litoral del Mediterráneo, por lo que gran parte de lo que cayó se fue al mar. Ayer, el embalse de Guadalest estaba al 81% de su capacidad e incluso hasta el pasado fin de semana tuvo las compuertas abiertas como prevención ante una gran avenida de agua debido a las gotas fría que han sacudido las Marinas.

Once billones de litros de agua o, lo que es lo mismo, 11 hm 3 de agua es el caudal que han logrado almacenar los pantanos alicantinos en los últimos treinta días. Embalses que continúan en situación de alerta pero no de emergencia, como subrayó Juan José Moragues. Los recursos del sistema Júcar alcanzan los 178 hm 3 , sesenta más que el año pasado e incluso ha aumentado significativamente el caudal en la desembocadura del río. El embalse del Amadorio cuenta con 11,46 hm 3 y está al 73% y el de Beniarrés tiene 15 hm 3 . En total, la cuenca del Júcar embalsa 616 hm 3 .

Por otro lado, el Congreso de los Diputados aprobó anteayer por unanimidad la convalidación del Real Decreto-Ley por el que se pondrán en marcha una serie de medidas urgentes para paliar los efectos de la sequía en las cuencas del Segura, Júcar, Tajo y Guadalquivir, y que se concretan en exenciones fiscales y supresión del pago de las tarifas de riego o trasvase (Mancomunidad de Canales del Taibilla);.

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, defendió la petición de la prórroga de los decretos vigentes de las medidas extraordinarias para la gestión de la sequía ya que señaló que en dichas cuencas «se han identificado determinados espacios donde los regantes han tenido una reducción significativa de la dotación de agua para regadío». Narbona explicó que con esta iniciativa se pretende, por ejemplo, «paliar el efecto económico que ha representado para la Mancomunidad de los Canales de Taibilla la necesidad de adquirir derechos al uso de agua necesarios para garantizar el suministro a todos sus municipios». La ministra reiteró que Medio Ambiente presentará en las próximas semanas un estudio con la cartografía de las zonas inundables, una de las materia que más desencuentros ha creado en las últimas semanas entre una parte del Ejecutivo central y el Consell.

La ministra ha vuelto a apuntar esta semana la necesidad de una moratoria urbanística para la franja litoral, cuestión que ayer volvió a ser contestada por el PP. Ricardo Costa, secretario general de los populares en la Comunidad Valenciana se preguntó «por qué Narbona plantea la moratoria y el PSPV se opone a ella en la Comunidad Valenciana». Costa no contestó sin embargo a las miles de viviendas aprobadas en Cullera, municipio gobernado por el PP.