Poco a poco va saliendo a la luz Al-quy, el antiguo poblado andalusí cuyo nombre corresponde con el de la actual ciudad. El yacimiento se encuentra en la zona de El Castellar y, según explica el director de las excavaciones, el arqueólogo Germán Pérez, «es de gran relevancia patrimonial».
En la quinta campaña de excavaciones está participando un equipo arqueológico formado por doce personas, entre licenciados, estudiantes de las universidades de Alicante, y personal y colaboradores del Museo Arqueológico Municipal Camilo Visedo Moltó. Todos ellos están trabajando bajo la dirección de Germán Pérez y siguiendo un estricto protocolo covid-19 elaborado para la ocasión.
«Todo el personal antes de subir al poblado debe tomarse la temperatura, el uso de guantes y mascarillas es individual y obligatorio, a la hora de desayunar mantenemos una distancia mínima de metro y medio, y cada uno llevamos nuestra cantimplora», detalla el director del proyecto.
En esta ocasión, los trabajos han sacado a la luz nuevas estructuras murarias adosadas a la muralla sueste. Esto ha permitido conocer, según indica Pérez, «la organización urbanística del asentamiento». Entre los hallazgos destacan tres estancias de unos cinco metros cuadrados, otro aljibe de grandes dimensiones y parte de una muralla con hasta tres contrafuertes de forma semicircular.
El director de las excavaciones asegura que el yacimiento de El Castellar cuenta con «la muralla más antigua de la provincia de estos momentos históricos», lo cual enriquece su valor patrimonial. Es precisamente por ello que, desde el Ayuntamiento, se mantiene la intención de dinamizar el yacimiento como recurso cultural y turístico.
«Es muy importante dar a conocer el asentamiento, que la gente pueda venir a verlo y conocer parte de su pasado. La idea sería la misma que la de El Puig [también en el término municipal de Alcoy]», donde según recuerda Germán Pérez, se realizan hasta visitas teatralizadas.
Volviendo a las nuevas construcciones que han aparecido en esta edición, en su interior se constata el derrumbe de los muros, entre los que «se ha documentado un ajuar cerámico muy homogéneo, datado de entre finales del siglo X y primera mitad del siglo XI». Asimismo, destaca, según insiste el director de la actuación, «la presencia de cerámicas de importación y recipientes de uso cotidiano, como los hornillos portátiles, ollas y cazuelas o candiles», pero también «elementos de vajillas de servicio decorados mediante motivos epigráficos y vegetales característicos de este periodo andalusí».
El arqueólogo explica que históricamente «los hallazgos se encuadran en unos años convulsos de finales del Califato de Córdoba y el inicio de los reinos de taifas, periodo en que en El Castellar se documenta desde el punto de vista arqueológico». Con todo, Pérez insiste en que «se ha constatado la creación de un poblado ex novo cuya función, en un primer momento, sería controlar las sublevaciones y revueltas de las poblaciones que vivían en la zona».
Cabe destacar también que las excavaciones están promovidas por el museo, financiadas por el Ayuntamiento y cuentan con la autorización de la dirección general de Cultura y Patrimonio de la Conselleria. Los trabajos finalizan mañana, a falta de la realización de unas fotografías aéreas, y continuarán con la documentación e inventariado de todo el material hallado para que pase a formar parte de los fondos del museo.
El estudio de materiales en El Salt será en agosto
El yacimiento de El Salt, situado en la parte trasera de la casa de verano del poeta Juan Gil-Albert, en Alcoy, permanecerá intacto después de más de 30 campañas de excavaciones. No obstante, tal y como adelantó este diario, un equipo formado por el codirector del proyecto, Cristo Hernández, y cuatro alumnos de La Laguna de Tenerife se desplazarán al interior de la provincia de Alicante para estudiar in situ algunos de los materiales hallados durante los últimos años. Según la información facilitada por la directora del Museo Arqueológico Municipal Camilo Visedo Moltó, Palmira Torregrosa, los profesionales se alojarán, al igual que en ediciones anteriores, en Villa Vicenta, la antigua casa del poeta, donde también desarrollarán los trabajos previstos en esta atípica campaña en El Salt. c. s.
