Repartir solidaridad por el desierto de Marruecos, ese es el principal objetivo de cuatro alumnos de la UPV de Alcoy y el IES Cotes Baixes. Carles, Joan, Dani y Valerià ya están recorriendo los 3.500 kilómetros en los que entregarán más de 200 kilos de donaciones solidarias. Juguetes, ropa, material escolar y kits de energía renovable son algunos de los objetos que han recogido de empresas y particulares y que han cargado en sus los dos vehículos que han rehabilitado de la chatarra para participar en la prueba.

Solidaridad y formación académica se han unido para hacer realidad la participación de cuatro alcoyanos en el proyecto UniRaid. Un itinerario de nueve días por el desierto de Marruecos en turismos de más de 20 años, que se lleva a cabo año tras año durante un período de diez días del mes de febrero. Un proyecto en el que ya se encuentran inmersos dos alumnos de la UPV de Alcoy y dos del IES Baixes.

Muchos meses de trabajo y cantidad de horas de empeño para hacer funcionar de nuevo dos vehículos que adquirieron y que eran casi chatarra. Tenían claro que tenían que trabajar de forma entregada para recuperar estas joyas automovilísticas que han hecho realidad su participación y lo que fue desde el inicio un gran sueño para ellos.

Entre los requisitos de participación exigidos por la organización se pedía que el coche tuviera una mecánica sencilla para que el coste de adquisición, preparación y reparación a lo largo del recorrido sea en todo momento asequible y posibilite la participación de estudiantes con ajustados recursos económicos.

Tal y como han explicado los integrantes del equipo del IES Cotes Baixes, además del proceso de restauración de la mecánica y la chapa del vehículo, también han realizado labores de comunicación para dar a conocer el proyecto y conseguir patrocinadores que les han ayudado a financiar el desarrollo y participación en este proyecto. Además de la adquisición del vehículo y el coste de las piezas los participantes han tenido que conseguir los 1.800 euros que les ha costado la inscripción, un reto en el que han recibido el apoyo de empresas y los propios centros educativos. A este montante económico se ha sumado también los más de 300 euros que estiman gastarán en combustible para recorrer todas las etapas. Una experiencia en la que no estarán solos ya que el proyecto, que este año ha cumplido su décima edición cuenta con la participación de más de 200 participantes de España, Andorra y Portugal.

Ilusión infinita

Entre el material solidario que se repartirá en las diferentes aldeas que visiten se encuentra kits de energías renovables, camisetas, material escolar y juguetes. Los alumnos destacaban la implicación de empresas y particulares en donativos para la causa solidaria.

A nivel académico desde el IES Cotes Baixes el responsable del proyecto, Miquel Fillol indicaba que «con la participación de estos alumnos queremos dejar huella y que otros reciban apoyo y se animen a participar en futuras ediciones o en otros proyectos que les motiven y les ayuden a formarse en habilidades importantes como son el liderazgo, el trabajo en equipo, la responsabilidad, la motivación, el emprendimiento y la solidaridad».

Todo un ejemplo a seguir en el que estos alcoyanos han dejado claro que conseguir un sueño es cuestión de perseguirlo y trabajarlo para que se haga realidad.