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Los pueblos de l'Alcoià y Comtat exigen la unidad de hospitalización domiciliaria

Consideran injusto que el servicio solo se preste en los municipios de mayor tamaño y advierten de que se está contribuyendo a la despoblación - Sanidad lo condiciona a un incremento de medios y personal

La farmacia de Penàguila. juani ruz

Los pequeños municipios de l'Alcoià y El Comtat reclaman a la Conselleria de Sanidad la unidad de hospitalización domiciliaria. Las localidades situadas en el ámbito rural consideran injusto que el servicio solo se esté prestando básicamente en los municipios de mayor tamaño lo que, advierten, contribuye a la despoblación. Desde el departamento autonómico avalan la iniciativa, aunque está condicionada a que se pueda conseguir un incremento tanto de medios como de personal.

Los pueblos de l'Alcoià y Comtat exigen la unidad de hospitalización domiciliaria

Los pueblos de l'Alcoià y Comtat exigen la unidad de hospitalización domiciliaria

El asunto ha sido tratado en la última reunión celebrada por el consejo de salud del departamento de Alcoy. Fue precisamente su presidente, Quico Fenollar, también alcalde de Alcoleja y máximo mandatario de la Mancomunidad del Xarpolar, el que puso el tema encima de la mesa. «El servicio no está llegando a los pueblos pequeños, con lo que los vecinos, la mayoría de edad avanzada, no tienen otro remedio que acudir al hospital de Alcoy para recibir unos tratamientos que podrían estar recibiendo perfectamente en sus casas, como sucede en los municipios de mayor tamaño», lamenta.

El alcalde de L'Orxa, Juan Pablo Pinar, se expresa en parecidos términos, tras haber sufrido el problema de la mano de sus padres. «Mi madre tiene que estar en el hospital para una intravenosa que podría realizársele en su domicilio, y ese es un problema que están sufriendo todos los pueblos. Después hablan de despoblación, cuando carecemos de servicios tan básicos como estos».

Los vecinos de algunas de estas localidades situadas en el ámbito rural son de la misma opinión. Este es el caso de María Dolores Casanova y Luis Oltra, de Alcoleja, quienes señalan que «cuando tanto se está hablando de la España vaciada, deberían poner medios para evitarlo». También opina lo mismo Miguel Gisbert, de Penàguila, a quien la implantación de la hospitalización domiciliaria «me parecería genial, porque evitaría desplazamientos y la gente se mantendría con más facilidad en los pueblos». La farmacética de este municipio, Ana Julia Quesada, lo considera igualmente necesario, y pide además que «la medicación salgan de las boticas rurales, que ya lo tenemos bastante complicado para mantenerlas».

Desde Sanidad se comparte la necesidad de ampliar el servicio, aunque se condiciona al aumento de personal y de medios. Fenollar señala que «haremos un seguimiento para que no haya ciudadanos de primera y de segunda».

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