La Conselleria de Medio Ambiente y el Ayuntamiento de Alcoy están estudiando fórmulas para limitar el acceso de vehículos al parque natural de la Font Roja. La medida, que se justifica por razones de seguridad, se pretende aplicar en el momento en que la zona de aparcamientos esté completa, con el objetivo de evitar colapsos en la carretera que puedan impedir el paso de los vehículos de emergencia en caso de incendios forestales o accidentes.
La Font Roja es uno de los parques naturales más visitados de la Comunidad Valenciana, lo que propicia que tanto en épocas vacacionales como durante los fines de semana sean numerosos los vehículos que acceden al mismo a través de la sinuosa carretera que llega hasta la zona del santuario. El problema radica en que cada vez con mayor asiduidad se supera la capacidad de la zona de aparcamiento, lo que propicia que los coches acaben estacionando en las cunetas de la carretera, dificultando, si no impidiendo, el paso de los vehículos de emergencia en caso de incidencia. Tal circunstancia se ha podido constatar con motivo de nevadas, o también con el espectáculo cromático que supone la llegada del otoño.
Tanto la Conselleria de Medio Ambiente como el Ayuntamiento de Alcoy ya han limitado el acceso de vehículos en momentos puntuales como la Semana Santa, cuando se ha habilitado un servicio alternativo de autobús.
Pues bien, el objetivo que se persigue ahora es convertir esa limitación en algo permanente, con el objetivo de evitar problemas de seguridad. El asunto ha sido tratado en la última reunión del consejo rector de la Font Roja, y se encuentra en estos momentos en fase de estudio para hallar la fórmula más adecuada.
El concejal de Transición Ecológica y Protección Civil, Jordi Silvestre, señala que lo que está encima de la mesa es la prohibición del acceso de vehículos una vez la zona de aparcamiento esté completa. «De lo que se trata -señala- es de implantar una medida que ya está vigente en otros espacios naturales, como es el caso de Ordesa, y siempre para evitar que se produzcan incidentes que después tengamos que lamentar».
Se estudia la posibilidad de cerrar la carretera a la altura del polieportivo Francisco Laporta, implantando un servicio de autobús, o bien de desviar el tráfico hacia Banyeres en el cruce situado a mittad de trazado. Ambas fórmulas, en cualquier caso, podrían ser complementarias.
La propuesta, de entrada, ha sido bien recibida entre los asiduos al parque natural, según ha podido constatar este diario.
