Muro pide un tejado auxiliar para evitar las goteras en los barracones del Bracal

El colegio Bracal, tal y como se ha venido informando, permanece en aulas prefabricadas desde hace nada menos que 12 años, justo el tiempo transcurrido desde que se detectó aluminosis en el antiguo inmueble que albergaba el centro.

Tras múltiples reivindicaciones, la Conselleria de Educación iniciaba por fin, a finales de septiembre, las obras de construcción del nuevo colegio, con el objetivo de que estén finalizadas en 2020. Sin embargo, desde el Ayuntamiento se considera que eso no es excusa para que los barracones sigan presentado importantes deficiencias.

Y es que nada más iniciarse el curso, coincidiendo con la gota fría, las clases tuvieron que quedar suspendidas debido a las múltiples goteras que incluso ponen el riesgo la seguridad de alumnos y profesores por su posible interactuación con las instalaciones eléctricas. Una situación que se ha venido repitiendo de forma frecuente cada vez que llueve con una cierta intensidad.

Este es el motivo por el que el Ayuntamiento se ha dirigido a Educación planteando una propuesta elaborada por los técnicos municipales, que consistiría en construir un tejado auxiliar sostenido por pilares encima de las aulas prefabricadas. Según el alcalde, Gabriel Tomás, «se trata de una solución relativamente económica que pondría fin a este problema. Por mucho que se hayan iniciado las obras del nuevo colegio, los niños continúan acudiendo a los barracones, y es responsabilidad de la Conselleria mantenerlos en condiciones óptimas, cosa que por desgracia no sucede en estos momentos». Educación, en este sentido, se ha comprometido a estudiar la iniciativa y a llevarla a cabo, siempre y cuando sea viable.

Montcabrer

La construcción del gimnasio del colegio Montcabrer, por otro lado, ha sufrido un imprevisto debido a problemas geológicos que incrementan los costes en 90.000 euros. Ayuntamiento y Conselleria estudian como hacer frente a este desfase presupuestario.