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Alcoy

La incorporación de 27 nuevos agentes permitirá recuperar la policía de barrio

El Ayuntamiento tramita una oferta especial de empleo para completar la plantilla del cuerpo, mermada a causa de las prejubilaciones - Las asociaciones vecinales reclaman el servicio para incrementar la seguridad y controlar mejor el tráfico

La policía de barrio tuvo, en su momento, una vida muy efímera en Alcoy. juani ruz

El Ayuntamiento de Alcoy está tramitando la incorporación de 27 nuevos agentes de la Policía Local con la finalidad de completar la plantilla, muy mermada en los últimos tiempos como consecuencia de las prejubilaciones. La iniciativa permitirá recuperar la policía de barrio, un servicio que estuvo en funcionamiento tiempo atrás de forma muy efímera, y que las asociaciones vecinales reclaman con el objetivo de incrementar la seguridad y controlar mejor el tráfico.

El gobierno municipal está en negociaciones con los sindicatos de cara a lanzar de manera inmediata una oferta especial de empleo para completar la plantilla de la Policía Local. Según ha explicado el concejal delegado, Alberto Belda, el objetivo es incorporar a 19 agentes, que se sumarían a los ocho que se encuentran en estos momentos en pleno proceso de selección.

La plantilla policial se ha visto mermada en los últimos tiempos a causa de las prejubilaciones, y el objetivo que se persigue con estas convocatorias es conseguir alcanzar un cuerpo de 105 agentes, que daría una mayor capacidad de maniobra.

En este sentido, uno de los servicios que se podrían recuperar es el de la policía de barrio, que hace años estuvo funcionando pero de manera efímera, debido precisamente a las limitaciones de plantilla. «Con las nuevas incorporaciones -resalta Belda- tendremos los seis turnos cubiertos, con lo que las posibilidades serán mucho mayores».

Las asociaciones vecinales ven la iniciativa con buenos ojos. El presidente del Ensanche, Paco Seguí, destaca que «hay que dar servicio a todos los barrios, porque la Policía Local es una figura imprescindible no solo en materia de seguridad, sino también en materia de control de tráfico y respeto por las normas de convivencia. En nuestro caso, por ejemplo, necesitamos que se respeten los límites de velocidad en la nueva calle Entenza, porque en la actualidad supone un problema que hay que erradicar con un mayor control».

El presidente de la asociación de vecinos de la Zona Norte, Manolo Flores, se queja por su parte de que «en la actualidad la Policía Local sí que pasa por el barrio, pero lo hace casi siempre en coche. Lo que necesitamos son patrullas a pie, que la gente vea a los policías y se incremente la percepción de seguridad a través de la vigilancia. La realidad es que no tenemos grandes problemas, pero es muy importante la presencia».

Desde la asociación vecinal de Santa Rosa, Juan Vicente Moncho señala que «más que policía de barrio, lo que hubo hace años fue un simple intento, porque apenas duró nada. Desde luego que nos parece perfecto que se quiera recuperar el servicio, pero lo que queremos es ver a los agentes por la calle, que se les vea, porque hasta ahora ante cualquier cosa que pasa no tenemos otro remedio que recurrir al retén».

Moncho también reclama al Ayuntamiento que «convoque a los vecinos y nos explique los detalles de la puesta en marcha de la policía de barrio, en lo que respecta a fechas y servicios que se prestarán».

El barrio más singular de la ciudad es, sin lugar a dudas, Batoy, al encontrarse alejado del resto del casco urbano. La presidenta vecinal, Cristina Valero, no duda a la hora de afirmar que «no vemos a los agentes todo lo que nos gustaría, y para un barrio como el nuestro, en que hay mucha gente mayor que vive sola, es muy importante la presencia policial. Además, durante las fiestas de Batoy apenas vienen, lo cual también es una cuestión a solucionar».

Destacar, por último, que la delincuencia en Alcoy sufrió un leve incremento del 2,4% en el primer semestre del año. Los principales incrementos fueron las sustracciones de vehículos y los robos con violencia e intimidación, descendiendo por contra los delitos contra la libertad sexual, así como las agresiones sexuales.

Atención a las quejas y peticiones de los ciudadanos

La policía de barrio estuvo funcionando años atrás pero de una manera muy efímera, y se centró sobre todo en la atención de las quejas y peticiones de los ciudadanos a través de un vehículo que se desplazaba a las diferentes zonas de la ciudad.

Ahora las asociaciones vecinales reclaman que el servicio sea mayor, y sobre todo que los agentes realicen patrullas a pie para reforzar la sensación de seguridad en las calles.

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