Más de cincuenta alumnos viven la sexta edición del campus tecnológico de Alcoy. Una experiencia educativa en la que los pequeños aprenden de la mano de la impresión 3D, la robótica o la programación de humanoides mediante aplicación móvil. Quince días de aprendizaje que acercan la evolución de la tecnología a todo tipo de edades y despierta su curiosidad en el aprendizaje de este mundo.
Quince días para aprender la evolución del mundo de la robótica y la tecnología y, además, dar forma a un proyecto personal para completar así su progresión en «CampusTec».
Este espacio lúdico y educativo se divide en dos franjas de edad para adecuar los diversos talleres al conocimiento de los niños. Durante los quince días de duración, los participantes de 1º, 2º y 3º de ESO realizan un total de cuatro talleres. En primer lugar, aprenden a diseñar piezas para poder llevarlas a cabo con impresoras 3D. Una vez adquieren habilidad con esta herramienta, realizan un pequeño juguete o adorno para completar así esta etapa teconológica.
Una vez terminada esta fase, los educandos realizan un robot móvil tipo lego que resuelve diversas misiones. El subdirector de Emprendimiento, Empleo y Generación Espontánea del Campus de Alcoy de la UPV, Jaime Masià, indicaba que en este tercer taller «iniciamos a los niños para una futura participación en la First Lego League».
Este es el primer paso para completar la formación en esta fase de la robótica en la que programan un mini humanoide que, en ocasiones, es capaz hasta de bailar.
Niveles avanzados
Los más mayores, de 4º de ESO, Bachillerato y ciclos formativos focalizan todo el campus en la realización de un robot que se puede controlar desde un dispositivo móvil. Masià explicaba que «diseñan las piezas, hacen la soldadura y realizan la 'app' necesaria para que el robot se pueda controlar». Puntualizaba que «es una forma de acercarles la robótica».
