La suntuosidad y el colorido de los tejidos que caracterizan a la tropas de la media luna vistieron en la tarde de ayer las calles de Muro. Bajo una tarde muy calurosa desfilaron las seis filaes que forman este bando y que mostraron un gran espectáculo a todo el público presente.
La Filà Llana era la encargada de abrir el desfile. Esta formación, que este año ha sido la encargada de ostentar el cargo de capitanía, daba paso a un boato ambientado en la lucha que moros y cristianos tuvieron por las tierras que envuelven las sierras de Mariola y el Benicadell. Incluso se pudo ver representada la muerte del cristiano.
Las espectaculares escuadras especiales centraban junto a los ballets el inicio del boato. Las armas y los útiles de defensa también estuvieron presentes, tanto en estas escuadras como en algunas de las carrozas que desfilaron. Sin duda, grandes trajes especiales acompañados de impresionantes maquillajes, mostraron una vez más la potencia y la suntuosidad del bando de la media luna. En su mayoría todas ofrecieron también un gran espectáculo ecuestre ya que los cabos batidores fueron una figura muy representada en estas escuadras.
El capitán, Rubén Sellés, hacía su entrada en la villa murera en una carroza de grandes dimensiones que representaba un paraje natural de la localidad. El traje, con colores muy representativos de la filà hacía también un homenaje a su familia portando en él dos ratones esculpidos en una coraza de metal para simbolizar el apodo que tiene la familia en el municipio.
Tras la filà de capitanía continuaron el desfile el resto de formaciones del bando de la media luna. Los Moros del Rif fueron los siguientes en desfilar, y más tarde Realistes, Tariks, Verds y Marroks, que con su abanderada cerraron el desfile.
Ausencia de pólvora
La pólvora no será hoy la protagonista de la jornada como es habitual año tras año. La retirada de una partida defectuosa ha hecho que la empresa suministradora se haya quedado sin pólvora y Muro no pueda disfrutar de sus alardos. Por ello las embajadas centrarán de forma única los actos de este día festivo. Unos potentes textos que ilustrarán esas batallas entre ambos bandos por la posesión de la villa murera.
La jornada se clausurará con el desfile humorístico de la retreta, que pondrá la nota divertida.
