Cada pieza que realiza un repujador de metales es única y la producción en este sector es lenta porque es un oficio totalmente artesanal. Santi Valor es el propietario del taller «Metall Art» y considera que «es un trabajo que no está valorado», y que cada vez más se mira el precio de las cosas «sin pensar en lo que hay detrás».
Con más de tres décadas de experiencia a sus espaldas, Santi Valor trabaja para los Moros y Cristianos de toda la Comunidad Valenciana, realiza encargos para Semana Santa de diferentes puntos de España y algunas piezas para teatro y cine. Aunque en el sector hay quien alquila, «nosotros no lo hacemos, solo vendemos por encargo».
El oficio poco ha cambiado desde que él empezó, y es que como muchos otros sigue siendo totalmente artesanal. «Sólo hay dos metalistas en la provincia reconocidos con el documento de cualificación artesano» y uno de ellos «somos nosotros», insiste Santi Valor. En cuanto a los precios, «yo hace diez años que no los subo», pero las materias primas «cada vez son más caras».
Si bien este año no tienen encargos de grupo para Alcoy, en el taller de Santi han realizado el traje más importante de las Fiestas, el de Sant Jordiet.
